Tres menorot fueron vandalizadas en distintos puntos del territorio ucraniano, durante las noches de Jánuca. Kiev, capital del país, junto con Dnipro y Mykolaiv, fueron las ciudades donde ocurrieron estos hechos, clasificados como «posibles crímenes de odio».
El antisemitismo no se toma descanso. Durante la festividad de Jánuca, muchísimos países alrededor del mundo colocan menorot para celebrar junto con la comunidad judía. En Ucrania, el odio volvió a aparecer, generando miedo entre las poblaciones de la diáspora.
El 30 de noviembre, sujetos que no han sido identificados rompieron las luces que adornaban la menorá que se encontraba en Mykolaiv, en el sur de Ucrania. Días más tarde, cinco adolescentes fueron detenidos por ser sospechosos de derribar el objeto en Dnipro. El último hecho hasta ahora fue en Kiev, donde también se tiró abajo el objeto gigante.
La cuenta oficial de la Embajada de Israel en Ucrania confirmó lo sucedido. Además, aseguró que gracias a la buena relación entre ambos países, se solicitó la ayuda de las autoridades locales para encontrar a los culpables y evitar más situaciones de esta magnitud.