El Ministerio de Educación publicó el martes 16 de mayo un informe en el que se revelaban nuevos datos acerca del estado de la educación, y sobre todo del dominio de la lecto-comprensión, como consecuencia de la crisis del Coronavirus.
El reporte reflejaba los resultados de las pruebas PIRLS (Progress in International Reading Literacy). Es decir, un examen estandarizado internacional que evalúa el progreso en las capacidades de lectura en el crecimiento de los niños. Es una prueba que se utiliza en muchos países y se repite cada 5 años.
En Israel, la última evaluación se había hecho en el año 2016. Pero a causa de la pandemia del COVID-19, el examen se realizó nuevamente recién en 2022. Según el informe del ministerio, el nivel de lecto-comprensión en Israel está de vuelta en el nivel que tenía en el año 2001. Sin embargo, no todo son malas noticias en el informe. En relación a los resultados de otros países, Israel mantiene un buen nivel.
El declive en los estándares de lecto-comprensión está significativamente más marcado entre los hablantes de hebreo. En las pruebas de los alumnos que hablan árabe, no se reflejó un cambio relevante desde la última prueba en 2016.
Según Yoav Kisch, responsable del Ministerio de Educación, afirmó que estos datos reflejan la crisis del sistema educativo israelí. “Nuestra misión es poner al sistema de pie, con un énfasis especial en estudiantes sobresalientes y ayudando a los grados que fueron especialmente damnificados por el Coronavirus”, expresó el ministro.