En 2005 Avital Davidovich Eshed presentó en la facultad de Humanidades en la sección de Historia Judía de la Universidad de Tel Aviv un trabajo para la maestría, con el nombre de “The Representation of de Women in the Hebrew Texts of the Crusades” La representación de la mujer en los textos hebreos de las cruzadas, trabajo que fue publicado últimamente en un portal internacional de trabajos e investigaciones históricas de Europa y el Cercano Oriente. Tomando en cuenta que hace unos días se celebró el día internacional de la mujer es una buena ocasión de presentar un resumen del trabajo ya que fue escrito por una mujer y habla sobre la mujer en tiempos que la mujer era tratada mal.
La primera cruzada a Tierra Santa se organiza en el año de 1096, que a su vez abre un capítulo nuevo en la relación entre judíos y cristianos, en Europa, ya que esta cruzada no fue únicamente un acto religioso, tomando en cuenta que la mayoría no era más que gente del pueblo y algunos aventureros, por lo mismo algunos cruzados decidieron saquear a comunidades judías en el trayecto para solventar los gastos de ese largo camino. Gran parte del grupo de las Cruzadas salieron de Alemania por lo tanto las comunidades judías del Valle del Rhin de este país fueron las más afectadas, de lo cual resulta que muchos judíos se convierten al cristianismo para no sufrir, mientras otros prefieren morir como mártires antes que convertirse.
Según lo menciona Avital en su trabajo lo anterior es parte de tres crónicas publicadas en el cual se habla de la primera cruzada vista por los ojos de Rabi Solomón, bar Samson, y en la crónica de Rabi Eliezer bar Nathan, además aparte de una crónica de aquellos años con el titulo de “Mainz Anonymous”
Rabí Eliezer Yehuda of Mainz describe los saqueos y el progrom desde el punto de vista familiar ya que en 1197 su familia sufre ataques y asesinatos.
Lo anterior nos enseña que las cruzadas no fueron únicamente con el fin de redimir “la santa tumba” y los lugares sagrados en Jerusalén si no en el camino por Europa para limpiar y purificar de judíos
Durante mucho tiempo se ha sabido que la posición de la mujer dentro del judaísmo, y más dentro de la religión y en las esferas de la sociedad ha estada en un punto inferior a la posición del hombre. Las normas sociales y religiosas llevaron a la disminución y minimización del papel de la mujer dentro de la cultura judía, ya que desde mucho tiempo atrás la cultura, sus escritos y su conservación siempre estuvo en manos masculinas.
Pero a pesar de la situación conocida en la sociedad judías, cuando principia la primera cruzada en el año de 1096 las mujeres se destacaron en la protección y cuidado de la familia, y tuvieron una actitud muy significante, lo anterior esta explicado ampliamente en textos y crónicas escritos en la época de las primeras cruzadas, la mayoría de estos escritos fueron redactados por hombres en los que representaban a la mujer como mártir.
En el trabajo se presenta una revisión general de las características y los pensamientos femeninos, para demostrar que, aunque las mujeres tenían una representación sustancial su mención es significante, en la mayoría de los casos se les menciona colectivamente, pero en ocasiones son mencionadas individualmente.
En el capítulo cuarto de su trabajo Avital establece una conexión entre las madres judías en la Edad Media, con otras madres en la historia judía, así como modelos de maternidad en la sociedad Cristiana de la Edad Media ya que la mujer cristina tenía dos identificaciones según la situación, si era negativa era como Eva al Ontario como positiva con María.
En el judaísmo no existía el monarquismo, la maternidad remplaza la imagen de la monja cristina, como modelo ejemplar del comportamiento femenino ideal. La maternidad en 1096 estuvo marcada por el sacrifico de las madres por sus hijos.
En un capítulo Avital relata la historia de dos madres, para delinear los distintos modelos de maternidad.
En ese capítulo realza Avital que uno de los roles designados para las mujeres es el de criadora y progenitora presentado que la maternidad no es un término fundamental o histórico si no una función e institución de género que cambia con el tiempo y el lugar.
Esta situación la vemos clara en nuestro tiempo si las mujeres de la edad media regresaran no se podrían acostumbrar a la vida y posición de la mujer actualmente
Versión distinta la leemos en Wikipedia que dice:” La historia de las mujeres en las cruzadas comienza con Ana Comneto” la hija del emperador bizantino Alejo 1 con un escrito sobre la primera cruzada presentando la historia desde el punto bizantino, desgraciadamente no termina su trabajo ya que la mandaron a un monasterio, pero es considerada como la primer mujer historiadora-
Por otro lado, la mujer en las cruzadas, se quedaba sola al cargo de los bienes familiares mientras el hombre salía por tiempo indefinido, se relata que mujeres lucharon con los cruzados en contra de los musulmanes.
“La presencia de la mujer y el papel que desempeñaron impiden todo paralelismo y nos introducen en cambio con otro universo de apasionante descubrimiento en nuestro fin del siglo XX”, Regine Pernoud “La mujer en las cruzadas”