La ciencia explica que el estrés al volante es uno de los factores centrales a la hora de controlar la seguridad vial. Una encuesta realizada en el 2018 en Israel reveló que el 79% de los conductores afirman que el tráfico es la principal fuente de estrés en su vida cotidiana. Además, se cree que el 90% de los accidentes viales se producen por un error humano.
Todos estos datos son los que llevaron a un grupo de científicos israelíes a querer obtener más información acerca del estrés al volante. Su objetivo es hallar herramientas de control y reducción del estrés del conductor, y para eso, desarrollaron un dispositivo que mide el nivel de estrés según la fuerza del agarre del volante.
Se colocaron 60 sensores en distintos puntos del volante. Esto permitió obtener datos acerca de la fuerza de agarre y el nivel de sudoración mientras se maneja. El estudio estuvo liderado por Yotam Sahar, un estudiante de doctorado de Ingeniería Industrial en la ciudad de Ariel.
Sahar afirma que “para mejorar la seguridad vial, es esencial reconocer los factores que afectan el desempeño del conductor. Específicamente los factores que se pueden moderar para mejorar el desempeño del conductor y la seguridad vial”.
Sahar considera que, a partir de esta investigación se podrán alcanzar soluciones. Es decir, los fabricantes de vehículos podrán producir sistemas de seguridad que ayuden a reducir el nivel de estrés del conductor, a partir de la biorretroalimentación.