Historias de aliá: Era de Nueva York, viajó a Israel para servir en las FDI y hoy tiene un estudio de arte en Tel Aviv donde se mezclan nacionalidades de todo el mundo

1 marzo, 2022 ,
Michal Berman. Cortesía.

Michal Berman nació en Nueva York, Estados Unidos, hace 32 años. Hace unos diez años, tomó una decisión que cambiaría para siempre su vida: venir a Israel para desempeñarse como “soldada solitaria”.

“Soldado solitario” es como se conoce a aquellas personas que llegan a Israel para servir en el ejército sin tener familiares en el país. “Una vez que finalicé mis estudios en arte, decidí venir a Israel. Serví mis dos años en el ejército como instructora de tiro, algo que no tiene mucho que ver con el arte”, relata desde su lugar en Israel: un estudio de arte en Tel Aviv.

Sucede que Michal eligió, después de servir en las FDI, hacer algo con esa experiencia y sus estudios anteriores en materia de arte. Primero, se formó en arteterapia, y luego, empezó a trabajar en un taller artístico en donde hoy se mezclan centenas de historias.

El estudio nació en 2009 en Tel Aviv de la mano de Natasha Miller, a la que luego se le sumó Michal. Hace unos años, Michal quedó a cargo totalmente, una experiencia que describe como “emocionante”. Previamente, Michal había vivido en Haifa, Ranana y un pequeño moshav al norte, que dice que es su lugar preferido.

El estudio queda en la calle Frug 42, en Tel Aviv.

“En el estudio el objetivo es juntar a los olim jadashim, los nuevos inmigrantes, con los israelíes. Cuando llegué, sentí esa necesidad de conectarme, y ahora quiero ayudar a otros a lograrlo”, explica Berman. “Aquí todos hablan heblish, comenta divertida, en referencia con la mezcla de hebreo e inglés (“hebrew and english”), mientras enumera países de donde provienen los alumnos, desde Rusia a Bélgica, desde Chile a Estados Unidos.

La historia presente de Michal es indisociable de su llegada a Israel. “Yo no iba a campamentos, no era una persona de vida al aire libre, y de repente llegué a Israel y me dieron un arma y me dijeron ‘ve’. Pasé a acampar, a pasar días sin bañarme. No tenía idea qué hacer, fue realmente abrumador”, rememora. 

“Vine con la ilusión de ser una pintora en el ejército, pensando ‘sí, seguro necesitan esto’”, dice entre risas. “Fue duro, hubo mucho llanto, pero creo que es algo que me formó. Sentía que si podía hacer eso, podía superar todo”.

La decisión de estudiar arte-terapia vino por ese lado. “Vi a muchos amigos pasar por momentos traumáticos. Y ahora trabajo con muchos soldados que sufren estrés post-traumático, puedo ver el poder sanador del arte. Es realmente maravilloso”.

Además de esto, Michal también se enfoca en los desafíos de los olim jadashim. “El hebreo es muy difícil de aprender. También la burocracia israelí es engorrosa, es necesario contar con una comunidad de apoyo para cosas como abrir una cuenta bancaria. Otra cosa es el espacio, acá se amontonan, es raro. Hay muchas diferencias culturales que son importantes a la hora de acomodarse”.

“Esto lo veo en quienes vienen al estudio, muchos tienen ganas de poder hablar de esto en un espacio seguro. Especialmente los que vinieron durante la pandemia, que estuvieron aislados mucho tiempo”, reflexiona. “Tengo una ole jadashá que llegó hace un año, tímida y educada, y ahora ya grita yallah, incorporó la cultura israelí, es impresionante ver eso”.

Una de las características centrales del estudio es que está abierto para todos los niveles. “Creo que cualquiera puede crear arte, aun si nunca tuvieron un lápiz en las manos”, describe Michal. Además de eso, existen una variedad importante de clases. “Hay clases con degustación de vinos, modelos vivos, arteterapia, pintura, fotografía, cerámica, graffiti… se trata de eso”.

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Actualmente, el estudio ya volvió a funcionar de manera total, recibiendo hasta 30 personas por clase. Durante la pandemia, Michal logró adaptarse a la virtualidad, algo que se mantuvo a pesar de la vuelta a la presencialidad. “Por ejemplo, el año pasado tuvimos una clase en San Valentín con gente de Italia, de Egipto, de Estados Unidos. Pudimos adaptarnos completamente a la nueva realidad y hoy estamos aprovechando esto para seguir creciendo”.

Por otro lado, otra actividad posible gracias a lo virtual fue un trabajo con niños, algunos huérfanos, de Ruanda, en África. “No hablamos el mismo idioma, nos comunicamos a través del arte”, señala, visiblemente emocionada.

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Frente a la consulta sobre qué recomendaría a los olim jadashim, Michal hace hincapié en la construcción de una comunidad. “Las personas van a querer sumarse, hay que caminar por la calle, ir a clubes, a cafés. Los israelíes son muy adeptos a formar parte de tu vida y ayudarte a asentarte”

Esta idea va más allá: Michal además juega a ser una celestina, según cuenta. “En una clase senté juntos a un chico de Rusia y una chilena, sabía que se iban a llevar bien y ahora ya van por su primera cita”.

Michal también nos brinda un perfil sobre su vida personal. “Mi libro favorito es ‘Alguien voló sobre el nido del cuco’, y mi película, ‘Ratatouille’”. De Israel, lo que más destaca es la solidaridad de las personas. “Siempre están atentas, siempre cercanas, es lo que me hace elegir este lugar”.

Llegando al final de nuestro diálogo, Michal sopesa los desafíos en este 2022 para el estudio. “Quiero que crezca, no solamente en lo financiero. Quiero traer musicoterapia, ludoterapia, quiero ofrecer más cosas para quienes vienen aquí”, señala además de indicar que un gran objetivo es “desestigmatizar la terapia, que todos puedan venir sin sentir que tienen un problema”.

Finalmente, Michal deja una reflexión para los lectores de Aurora: “Las personas ven el arte como una forma de expresión, y aunque estén nerviosos de comunicarse, o el idioma les resulte difícil, el arte siempre será una increíble plataforma para crear y reconfortarse. Estés en Israel o en otro país, crea, exprésate, trata de conectarte con otras personas alrededor del mundo. El tiempo para hacerlo es ahora”.

Datos del estudio

Instagram- telavivartstudio
Facebook – Tel Aviv Art Studio
Sitio web: www.telavivartstudio.com
Número de teléfono: 052-5403813/052-4742283

Dirección: Frug 42, Tel Aviv.

Cortesía.
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