El tratamiento de fertilización in vitro, habitualmente llamado IVF por sus siglas en inglés, es una manera de referirse a los procedimientos que se realizan en la actualidad para evitar o disminuir los problemas genéticos y de fertilidad y conseguir que las mujeres tengan embarazos viables y sanos.
Consiste en la extracción de óvulos maduros desde los ovarios. Estos óvulos son fecundados con el esperma fuera del cuerpo, en un laboratorio. Finalmente, los óvulos fecundados se implantan en el útero. Es una método de reproducción asistida que es cada vez más habitual en todo el mundo.
Fairtility es una empresa israelí con base en Tel Aviv que se encarga de mejorar la eficacia de los tratamientos de fertilización in vitro. ¿Cómo? Desarrollaron el asistente de Inteligencia Artificial, llamado CHLOE (Cultivating Human Life through Optimal Embryos). Con esta herramienta, los médicos tendrán más información a la hora de decidir los embriones con mejor potencial para la implantación y su posterior desarrollo.
Este innovador sistema de Inteligencia Artificial está entrenado para almacenar y analizar millones de puntos de información para asignarle a cada embrión un puntaje según su futura salud y viabilidad.
El Centro de Salud Reproductiva y Genética (CRGH) de Londres, Reino Unido, está por empezar a aplicar esta tecnología en sus tratamientos de IVF. El objetivo es optimizar y también mejorar las posibilidades de éxito de cada paciente.