Una empresa israelí desarrolla globos especiales para capturar carbono que proporcionarán el primer sistema asequible y escalable del mundo. Esto será para capturar carbono de la atmósfera.
La carrera está en marcha para reducir el uso de gases de efecto invernadero y la quema de combustibles fósiles, los cuales contaminan el aire. Y el otro objetivo es eliminar el exceso de dióxido de carbono de la atmósfera y almacenarlo por mucho tiempo en algún lugar.
El mes pasado, el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático de la ONU ratificó que la eliminación es clave para que el mundo cumpla los fines climáticos del Acuerdo de París. Para ellos, los gobiernos y las empresas prometieron cumplir con el plan cero emisiones netas.
Según Nadav Mansdorf, director ejecutivo de High Hopes Lab, dijo que la mitad de los GEI son absorbidos por la naturaleza cada año. Mientras que el resto tendrá que eliminarse gracias a la humanidad para mantener el ritmo de cambio climático donde está.
“El carbono se congela alrededor de menos 80 grados centígrados (menos 112 grados Fahrenheit)”, explicó Mansdorf. “Podemos encontrar esas temperaturas a 15 kilómetros (nueve millas) sobre la Tierra”.
Por otro lado, a medida que el viento sopla el globo con la carga útil lleno de hidrógeno, el carbono que contiene se separa y se guarda en una especie de compartimento congelador. Luego, el peso del carbono devuelve el globo a la tierra y el carbono sólido se convierte en gas de dióxido de carbono cuando va bajando.
Con un duración de dos horas de viaje, el dióxido de carbono se vende a la industria para procesos de producción de plástico hasta la creación de bebidas carbonatadas. “La clave es que sabemos que funciona”, agregó Mansdorf. El primer hito, pensando en 2023, será atrapar de 50 a 300 kilogramos. Y el segundo es el “cambio de juego, y los números muestran que podemos hacerlo. Podremos atrapar una tonelada métrica (2.205 libras) de carbono, por globo, por día”.