La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) publicó su informe económico anual el miércoles. En él, el organismo proyecta que la economía de Israel crecerá un 3,4% en 2025 y un 5,5% en 2026, cifras superiores al promedio global, que es de 3,1% y 3% respectivamente.
Sin embargo, el organismo advierte que el alto costo de vida y la incertidumbre generada por el gasto militar pueden afectar el desarrollo económico del país.
El informe detalla que, aunque la economía israelí ha demostrado resiliencia ante los efectos de la guerra en Gaza y el Líbano, el aumento del gasto en defensa ha ampliado el déficit fiscal y afectado la inversión y las exportaciones.
Ante esto, el secretario general de la OCDE, Mathias Cormann, instó a Israel a adoptar reformas que fortalezcan la productividad y la competitividad más allá del sector tecnológico, como por ejemplo la reducción de barreras comerciales, la eliminación de subsidios para estudiantes de yeshivá y la simplificación de procesos burocráticos.
El informe también advierte que el crecimiento económico a largo plazo dependerá de la integración de sectores de la población con baja participación laboral, como los hombres ultraortodoxos y las mujeres árabes, por lo que recomienda condicionar los subsidios a las escuelas ultraortodoxas a la enseñanza de materias básicas y nivelar el financiamiento de las escuelas árabes con otras de características socioeconómicas similares.