Nacido el 14 de mayo de 1970, Daniel Lewin se mudó a Israel desde Estados Unidos a los 14 años por decisión de sus padres. Con el proceso complejo de adaptación a una nueva cultura de vida, el joven americano se fue enamorando del país poco a poco.
Amante de las matemáticas, se alistó en el ejército israelí con 16 años. Asiduo visitante del gimnasio, levantaba pesas y su físico estaba en un gran nivel. Por esta razón, entró en una unidad prestigiosa de las Fuerzas de Defensa de Israel, Sayeret Matkal: pasó la selección, lo aceptaron y allí estuvo durante cuatro años.
Con su ascenso a oficial de carrera, pasó a trabajar como investigador en el Technion, el instituto de tecnología de Haifa.
Casado con Anne y padre de Itamar y Eitan, también dedicaba su tiempo a un trabajo de investigación en IBM.
Su mejor amigo, Marco Greenberg, a quien conoció en 1986, lo calificó de la siguiente manera: “Danny usaba diferentes gorros. Si lo puede creer, era tanto un padre cambiando pañales con su esposa y un estudiante estelar en el Technion, graduándose con menciones en Matemática, Ciencias Informáticas e Ingeniería Eléctrica. Mientras cumplía con su trabajo de reservista en Sayeret Matkal, estaba en la unidad de comando de élite corrigiendo asignaturas. Cuando cenábamos en su apartamento en Haifa, observaba los errores de otros estudiantes brillantes, y solía debatir sobre política, todo esto al mismo tiempo”.
Gracias a la beca para un doctorado en el MIT, la Universidad de Ciencias Informáticas más prestigiosa del mundo en 1996, Lewin prosiguió su trabajo y compuso un algoritmo que cambiaría Internet para siempre. El concepto “Consistent Hashing” lo utilizó para que las páginas webs manejen tráfico en línea más alto. En 1998, junto con su profesor, Tom Leighton, y otros socios, fue co-fundador de Akmai Technologies.
Sin embargo, todos sus sueños de prosperidad se acabaron el 11 de septiembre de 2001. Gracias a sus conocimientos de defensa aprendidos en el ejército israelí, intentó detener a los terroristas de Al-Qaeda que se encontraban arriba del avión en el que viajaba con destino a Los Angeles. Sin embargo, los atacantes lo apuñalaron por la espalda. De este modo, con 31 años, fue la primera víctima de aquel fatídico día, previo a los impactos que marcarían un antes y un después en la historia.
Exsoldado de las FDI y pionero de Internet, Lewin sigue siendo recordado hasta la actualidad y su legado está más vivo que nunca.