Tras el gran éxito de su anterior visita la Compañía de Danza Gauthier regresa a la Ópera Israelí, esta vez con una pieza basada en “El lago de los cisnes”, obra única de Pyotr Ilyich Tchaikovsky, que ha merecido muchos elogios. En esta ocasión la compañía presentara cuatro interpretaciones modernas y totalmente personales del ballet clásico considerado el más famoso del mundo. Son cuatro piezas de 20 minutos cada una, en diferentes estilos, que forman un ballet de cuatro actos titulado “Los Lagos de los Cisnes”. En plural, por estar compuesto de las creaciones de los coreógrafos: Marie Chouinard, Marco Goecke, Hofesh Shechter y Cayetano Soto. Se presenta entre el 20 y el 22.10, en el Hogar de la Opera, en Tel Aviv.
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Precisamente por la iconicidad de la obra estrenada por el Bolshoi en 1877, Eric Gauthier, director artístico de la Compañía Gauthier, decidió desafiar a cuatro coreógrafos contemporáneos y líderes en su campo para volver a examinar la famosa obra maestra y crear su propia visión de la misma. El punto de partida de los cuatro es el mismo, pero cada uno crea una nueva energía y aporta su nueva interpretación personal a la pieza icónica.
La canadiense Marie Chouinard, coreógrafa, diseñadora de escenografía, vestuario, iluminación y video, crea “El canto del Cisne”. Aclamada internacionalmente durante décadas, presenta una experiencia sensual en su interpretación que combina danza, música electrónica, una adaptación de Louis Dufort a la famosa música de Tchaikovsky y proyecciones de video. En su obra “Swan Cake”, el exitoso coreógrafo israelí Hofesh Schechter, ofrece una interpretación oscura, política y física, mientras observa los deseos, fantasías y sueños de personas sin lugar, hogar o elección, haciéndonos comprender que debajo de la superficie hay una tipo muy singular de belleza. Su trabajo estará acompañado de música original de su autoría.
El español Cayetano Soto, famoso por sus extravagantes coreografías, presenta en su obra “Sin título para 7 bailarinas” el mágico momento de la transformación del hombre en animal, de la mujer en cisne, en una obra acompañada de la música del compositor escocés Peter Gregson. El coreógrafo alemán Marco Goecke es la segunda vez que crea inspirado en el famoso ballet. Su nuevo trabajo para esta compañía se titula “Shara Nur” y explora cómo puede verse hoy en día el sueño del ballet clásico definitivo con un grupo de bailarines acompañados por la música de Björk y Jesse Callaert.
Fotos de Jeanette Bak