Swell Ariel Or es una actriz israelí que saltó a la fama por su papel protagónico en la serie La Reina de Jerusalén. Solo dos semanas antes del ataque de Hamás del 7 de octubre, Or se mudó a Estados Unidos.
Desde el exterior, y mientras promociona su nueva serie, la actriz se refirió al difícil momento que enfrenta su país natal. Curiosamente, su nueva película se llama Kissufim, el nombre de uno de los kibutz ubicados cerca de la frontera con la Franja de Gaza, la zona más afectada por el ataque terrorista de Hamás. En Kissufim murieron 8 personas el 7 de octubre.
Kissufim cuenta la historia de un grupo de soldados israelíes que hacen trabajo voluntario en el kibutz en la década de 1970, después de la Guerra de Yom Kippur. Allí se enfrentan a las complejidades de la vida adulta, a la responsabilidad, al amor y a la sexualidad, en el fin de su servicio militar.
Con 24 años, Or afirma que no quiere ni siquiera “pensar en las personas que sobrevivieron que ahora recibieron las noticias más terribles sobre sus seres queridos y que van a lidiar con el trauma de esto y el eco de esto durante mucho tiempo”. En el 2016, ella ya había sido testigo de un tiroteo en la calle Dizengoff de Tel Aviv, y se enfrenta a síntomas de estrés postraumático desde entonces.
Consultada por cómo se siente con la situación en Israel, Or respondió que su “alma está triste, como una tristeza que no estaba consciente de que existiera en este mundo. Y al mismo tiempo, llena de fuego para luchar. Lo que sucedió el 7 de octubre es mi pesadilla. Y literalmente mis pesadillas de años, así es como se ven. Simplemente no podía creer que fuera real”.
Además, agregó que estar en el extranjero le hizo darse cuenta de que tiene “una voz y tengo que usarla en el ámbito internacional para explicar a la gente con lo que estamos lidiando. Abrió la caja de Pandora de mi comprensión de cómo el mundo nos ve. Porque, para mí, la gente israelí es la más honesta del mundo. A veces, demasiado honesta. Hay personas aquí que están negando el 7 de octubre. Dicen que nunca sucedió. O si sucedió, entonces lo merecemos por 75 años de ocupación”.
Además, contó que decidió recaudar fondos para que los reservistas fuera de Israel puedan volver al país.