En todo séder nunca falta la keará. Este plato tan especial es un relato vivo de la historia de pésaj, y se compone de distintos elementos que nos recuerdan distintos aspectos de la festividad
Desde AURORA queremos que tengas todo para este séder y además, que sepas exactamente de qué se trata cada componente de la keará.
Zroá: Pata de pollo o de cordero asado
Simboliza el sacrificio ritual de Pésaj. Con la sangre del cordero se marcó las casas de los judíos para que las plagan no cayeran sobre ellos. En algunas casas vegetarianas se reemplaza esto por una remolacha.
Beitzá: Huevo duro
Representa el ciclo de vida al ser ovalado. También es el recuerdo de que el pueblo judío se fue endureciendo para poder superar la amargura de la esclavitud.
Maror: Hierbas amargas
Amargura por el recuerdo de haber sido esclavos en Egipto.
Karpás: Papa hervida, cebolla o apio
Este elemento pretende estimular la curiosidad de los chicos. Se sumerge en agua con sal, aludiendo a las lágrimas de nuestros antepasados.
Jazeret: Rábano picante o hierbas amargas
Al igual que el maror, lo que señala es la amargura por la esclavitud en Egipto. El jazeret es tambíen utilizado para el armado del sándwich korej, un paso indicado en la hagadá de Pésaj.
Jaroset: Mezcla de manzana, nueces y canela
Recuerda el color del material del ladrillo que nuestros antepasados hacían en Egipto.
Por otro lado, hoy en día hay quienes ponen una naranja en el plato. Esto se debe a una famosa frase de un rabino ortodoxo, que dijo que «tiene tanto que ver una mujer en el kótel como una naranja en el séder de Pésaj». Así, como respuesta a esto, algunos movimientos feministas agregan el cítrico a la mesa.