Joseph Hodara
El celebrado historiador israelí Yaakov Talmón (1916-1980) acertó en sugerir y sistematizar los orígenes y el desenvolvimiento de un sistema político e ideológico que denominó la democracia totalitaria. Concepto y realidad que habrían empezado a forjarse en los preámbulos de la revolución francesa, y que se perfilan y elucidan en los escritos de Jacques Rousseau. Como régimen se institucionalizó en varios países y periodos en el curso del siglo XX. Alemania, Italia, y la URSS constituyeron entonces ejemplos conspicuos, y no faltaron ensayos para instalarlo en tiempos idos en algunos países de América Latina.
Democracia implica un régimen gubernamental que se sustenta en ciudadanos que libremente escogen a sus líderes, respeta la división de las diferentes modalidades del poder incluyendo a los medios de información, institucionaliza la igualdad ciudadana en materia de deberes y derechos, y ofrece instrumentos para corregir e incluso cambiar el orden político cuando éste lesiona o contradice las expectativas de la sociedad.
En contraste, un régimen totalitario centraliza y controla todos los resortes del poder en una figura que se considera mágica o carismática, silencia o reduce cualquier factor de oposición, y pone desmesurado énfasis en las amenazas externas a fin de alentar temores sociales que le benefician.
Yaakov Talmon demostró que las diferencias entre estos dos sistemas se evaporan en la realidad política e ideológica de nuestros tiempos. Uno puede conjugarse y confundirse con el otro de suerte que rasgos democráticos y totalitarios coexisten en inestable equilibrio. Sólo la capacidad crítica y la lúcida movilización de los sectores sociales puede frenar esta tendencia en tanto que el pasivo conformismo y las inercias intelectuales le auspician y favorecen.
La evolución política de Israel – incluyendo el lapso pre-estatal – revela la presencia de algunas modalidades de la democracia totalitaria. Así, a lo largo de ese periodo y hasta los años setenta nociones marxistas y post-marxistas coexistieron con la democracia liberal. Las coaliciones gubernamentales jefaturadas por Ben Gurión y las figuras que le siguieron aceptaron algunas tendencias de este carácter. Por ejemplo, líderes de organizaciones obreras y de los kibutzim, además de algunos intelectuales auspiciaron prácticas y demandas que no siempre coincidieron con el credo liberal.
Un giro importante se produjo en el periodo beguinista. Aquí se puso énfasis en un nacionalismo fundamentalista que glorificó en su retórica el triángulo Dios-Tierra prometida y Pueblo elegido, sin lesionar sustancialmente el libre juego democrático. Sin embargo, en ambos periodos se preservó el equilibrio de los poderes, la irrestricta evaluación de políticos y políticas, y el amplio respeto a la figura presidencial como garante de la unidad nacional. Un equilibrio que hoy se tambalea.
En efecto: en las últimas dos décadas rasgos que definen a la democracia totalitaria brotan en la realidad israelí. No hay que apelar a Maquiavelo para sugerir que el poder corrompe cuando no es debidamente controlado; efecto que se multiplica cuando un liderazgo y una facción política perduran por largo tiempo. En estas circunstancias ascienden los signos de un liderazgo que busca totalizarse y eximirse de una estricta vigilancia.
El ascenso en Israel de la ortodoxia no sionista y antidemocrática en la coalición gubernamental es uno de ellos. Las concesiones ofrecidas en los últimos días al viceministro de salud es un ejemplo. Institucionaliza y multiplica la injusta tolerancia a una amplia población en constante crecimiento que modela y arriesga el futuro del país sin asumir las cargas militares y sin tomar parte activa en las ciencias y en las artes.
A este hecho se agregan otros que nos aproximan a la democracia totalitaria. La implantación de temas religiosos en los textos escolares, la dinámica colonizadora en Judea y Samaria como mandato bíblico y estratégico a expensas de los cuatro millones de palestinos que los habitan, y las torcidas críticas a la diáspora judía son algunos indicadores.
Y a ellos se añaden en los últimos días dos inquietantes hechos. De un lado, medidas institucionales y legislativas que le permitirán a la familia Netanyahu contener y disolver el alud de acusaciones y sospechas en torno a múltiples signos de corrupción que instancias jurídicas y policiales han venido reuniendo. Por esta vía los delitos cometidos y que habrán de cometer la élite en el poder no serán tema de la opinión pública ni de los medios de comunicación. Gozarán de indulgencias de propia autoría. Tal vez los historiadores en algún futuro conocerán estas distorsiones, si Netanyahu y sus ayudantes no aciertan a borrar cualquier rastro.
Por otro lado: la figura presidencial como representante y mediadora de la sociedad israelí se deteriora en estos días como resultado de torcidas intervenciones. Para algunos diputados de equívoca biografía Reuvén Rivlin es hoy el presidente “de la izquierda israelí”. Etiqueta que no sólo personalmente le ofende; también rebaja y deslegitima su autoridad. Y como si esto no fuera suficiente, Netanyahu y miembros de su gabinete le solicitan indebidamente acortar la sentencia de un soldado que claramente dañó la ética militar. Así se corrompe la necesaria y equilibrada división del poder.
Circunstancias y tendencias que propician en Israel y en nuestros días algunos signos de la democracia totalitaria que el historiador Yaakov Talmón visualizó en la Europa fascista y comunista. ¿Tendremos los recursos y las fuerzas para contenerlos?
Primero el Estado Judío, luego la democracia.
Toda LaEl, mi voto siempre ha sido para Netanyahu, Likud, quien entiende que Eretz Israel no es una matana a cambio de…, Pero falta entender por el publico que tambien Eretz Israel no es como los demas paises del planeta, sino tiene una finalidad, la cual le da su legitimidad de Existir, es para un pueblo Judio donde pueda desarrollarce como tal. Que sostiene un cuerpo parado? su Alma. asi-Que sostiene a Israel?? este es el punto que el publico necesita digerir. Mejor temprano que tarde.
Brillante Prof. Hodara. O cambiamos pronto o vamos a nuestra propia destrucción gracias a los politicos que supimos conseguir
Con un policía que acusa a un P.M. por no devolver botellas vacías, ya lo dijo una diputada «israel es un país de locos»,y para un país especial, debemos tener una política especial.
En Buenos Aires es difícil evaluar la corrupción en otros países, por razones obvias. También hay botellas llenas, acuerdos ilegales con prensa opositora, submarinos, etc.
buen articulo……globalmente positivo…..como dirian los seudo criticos del comunismo en los años 70 del siglo pasado……contrasta con el articulo del mismo autor del mes pasado en el que festejaba el aniversario de la llamada revolucion de octubre…..
es contradictorio su preocupacion por la salud de la democracia israeli y un mes antes celebrar la liquidacion de la primera y hasta ahora unica democracia rusa…..porque lo que la llamada revolucion de octubre….no fue otra cosa que un vulgar golpe de estado de la guardia roja capitaneada por troksky contra un gobierno democratico presidido por el socialista keresky….
despues de la cual vino la implantacion de lo que el sr.hodara llamo…….una nueva cultura politica……no se si puede considerar tal cosa……un estado totalitaria.tiranico,que por primera vez organizo campos de concentracion.una policia politica que dejo en ridiculo a la ojranah zarista y el asesinato en masa de oponentes politicos por millones——
y en la siguiente guerra civil moririan entre 8 y 9 millones de personas……violentamente…..en la guerra oh ejecutadas…..aunque la gran mayoria murieropn de hambre y enfermedades…..y lo peor estana por venir…..stalin y su terror…….jamas habrian sido posibles si lenin….y tantos judios revolucionarios…..
no hubieran creado el estado totalitario……y la monstruosa maquinaria represiva…..de la que stalin se apodero desde dentro.y todo esto se hizo en nombre de las buenas intenciones y de crear un mundo mejor…..un periodico israeli recordo recientemente que la autentica revolucion judia del siglo xx……y de la unica que debemos sentirnos orgullosos es la revolucion sionista….
y que hoy hay mas judios en jerusalem……que en todo el antiguo imperio zarista y la difunta union sovietica…..hasta tenemos hoy aqui a una parte de la familia trotsky…..y con todos sus defectos este el mejor estado que los judios tienen el mundo…..porque es nuestro…..y pese a los intentos de rebajar su democracia…bibi and company…..
continua siendo……y espero que continue siendolo……..muchisimo mejor que estas democracias que nos dan lecciones de moral…..y haber mantenido esta democracia pese a estar durante mas de un siglo en permannete estado guerra……y con enemigo que amenaza con destruirnos…..y que interpreta toda concesion….
desde los acuerdos de oslo hasta la retirada de gaza……pasando por las ofertas de barak en taba en el año 2000 y de olmert a abbas en el 2008 como una muestra de debilidad que sirva de base a nuevas agresiones en el objetivo final de destruir a israel…..haber mantenido pues un israel democratico es un logro unico es la historia humana……
y para corregir sus errores y disfunciones ya tenemos a criticos como el sr hodara….para señalarlos que vamos por el mal camino…..por lo tanto gracias sinceramente al sr. hodara por su brillante y bien documentado articulo…..y no se preocupe……SOBREVIVIREMOS A BIBI.
El gobierno Kerensky no era electo democraticamente sino fruto de una revolucion contra el regimen monarquico y no cumplio la promesa de apartarse de la guerra.