Gran Film

Dunkerque (Reino Unido, 2017). Dirección y guión: Christopher Nolan. Fotografía: Hoyte Van Hoytema. Música: Hans Zimmer. Montaje: Lee Smith. Actores: Flenn Whitehead, Damien Bonnard, Aneurin Barnard, Kenneth Branagh, Tom Hardy, y muchos otros.
El film trata de dar representación a la épica batalla de Dunkerque, a fines de mayo y principios de junio de 1940 cuando Hitler invadió Francia superando por el norte la supuestamente impasable línea Maginot en dos semanas, con el ejército británico expedicionario batiéndose en retirada llegó a las playas de Dunkerque, una ciudad en la frontera con Bélgica.
Estaban ahí cercados por los alemanes unos 350.000 soldados con la imperiosa necesidad de salvarlos a través del canal de la Mancha, expuestos a ataques aéreos y submarinos, el Reino Unido no podía permitirse el “lujo” de perder semejante fuerza que lo hubiera debilitado fatalmente. El film de Nolan ha sido rodado en formato IMAX 70 mm, haciendo la experiencia impresionante, aún más si se quiere, pero en la mayoría de las salas que no tienen estas facilidades, no se perderá el efecto, mirar es sentirse sitiado.
Esta historia ha sido ya objeto de incursiones cinematográficas anteriores, pero ésta es diferente por la manera en que ha sido hecha. La película nos pone en la mitad de la acción y en realidad nos tiene atentos de una toma a la otra. Es una obra de conjunto que no se toma, intencionadamente, el trabajo de hacer la habitual exposición de los personajes, algunos de ellos aparecen y luego desaparecen en el medio de multitudes, sin darle lugar a narrativas verbales, algo raro en películas de Nolan que justamente se caracterizaban por masivas exposiciones verbales.
Se divide en tres aspectos, uno que dura una semana que es el tiempo del rescate, un día, el tiempo del yate privado que llega de la costa inglesa para rescatar y una hora, que es el tiempo de los combates aéreos. Se trata a cada persona en esa playa, en los botes y en el aire como un organismo colectivo, interesándose menos en sus detalles biográficos que el rol que desempeñan en el drama de la historia. Es un retrato de una sociedad luchando por la supervivencia y no se interesa en el apuro de individuos a menos de que traten de salvarse a sí mismos y a otros.
Tom Hardy es un piloto de Spitfire británico que trata de batirse con los Messerschmitt alemanes, tiene tal vez poca cantidad de diálogo con colegas en el aire y pasa el tiempo detrás de una máscara en su avión, su personaje es la suma de sus acciones. Mark Rylance as un ciudadano con un yate y con su hijo adolescente está determinado a llevarlo a Dunkerque para rescatar a cuantos soldados pueda.
Hay un grupo de soldados, uno de los cuales es encarnado por Harry Stiles, que corren de la ciudad a la playa, algunos son diezmados por lo que luego resultaría ser fuego “amigo” de la resistencia francesa y asì llegar a una larga dársena que se prolonga hasta dentro del canal. Algunos otros como Kenneth Branagh, encarnando al comandante de más alto rango del ejército británico también ilustran la escena pero esas apariciones individuales son contadas.
El film no tiene un héroe central, contrariamente a la concepción habitual que siempre movilizara la narrativa del Hollywood clásico de que ha historia hay que contarla desde el punto de vista del individual, algo que  con la escasez de diálogos le otorga al film ser casi abstracto, a veces de características impresionistas que se convierte en esencia simbólica contrariamente a los filmes de guerra hechos hasta el presente.
Hay una problemática en el hecho de que todo film de guerra tiene que proporcionarle al espectador entretenimiento. Si bien un film de guerra aunque espectacular, infernal, no puede, como algunos creen otorgar la sensación de estar en la situación misma del campo de batalla, algo absurdo ya que no se trata de la cosa misma sino de su representación. Nolan se mide con éxito con estos dilemas desde el punto de vista ético y estético, ya comenzando con un evento de guerra que tuvo una dimensión mítica pero que se consideró una derrota, la cuestión era cómo hacerlo y desde qué ángulo y con qué idea.
Churchill en uno de sus famosos discursos declaró que las guerras no se ganan con retiradas pero que también lucharemos contra ellos en tierra, mar y aire. Hasta hoy en día no hay una explicación del porqué Hitler retuvo su ofensiva contra Dunkerque pese a las intimaciones de sus generales, pero en el film este aspecto no es tema… Nolan firma aquí probablemente el mejor film de su carrera. Se ha medido con innumerables retos en aras de la autenticidad, barcos de la época, disposición geométrica de los soldados. Un gran film de guerra, original, diferente.