Distintos episodios de violencia ocurridos en Israel durante las ultimas jornadas, suman tensión en momentos donde hay varias cuestiones en juego. Este fin de semana, el país fue atacado desde la franja de Gaza en varias oportunidades. 40 misiles lanzados por Hamás hicieron que los ciudadanos del sur del país debieran estar alertas y correr a los refugios permanentemente. No se registraron víctimas, ni tampoco daños materiales de gravedad.
Además de las tres noches consecutivas de misiles gazatíes, también en Jerusalén hubo enfrentamientos entre manifestantes palestinos, judíos y las fuerzas de seguridad. Más de 40 personas resultaron detenidas y algunos agentes terminaron heridos.
Por otra parte, Israel respondió en Gaza a través de ataques precisos a puntos estratégicos. Según el ejército, se logró destruir infraestructura de la organización terrorista.
En el medio de este fin de semana bajo fuego, también se acrecientan presiones por las venideras elecciones palestinas. Hamás y la Autoridad Palestina continúan con sus peleas en vez de ocuparse de la crisis del coronavirus que golpea en Gaza y Cisjordania.
Así las cosas, desde el gobierno de Israel están en estado de alerta. Benjamín Netanyahu declaró que están preparados para “cualquier escenario posible” en Gaza. En Jerusalén, pidió calma y garantizó que se defendería la «libertad de culto».