Numerosos israelíes hacen cola para recibir la vacuna contra la gripe, mientras el sistema nacional de salud parece sufre un déficit de dosis para combatir una cepa que ha demostrado ser más virulenta que en años anteriores.
Más de un centenar de personas han sido hospitalizadas en grave estado, comparado con 45 en el invierno de 2018-2019, y 77 en el anterior.
Pero se estima que las cifras crecerán por que el pico de la temporada de gripe se registra aproximadamente en enero.
Alrededor de 1,8 millones de personas han sido vacunadas hasta ahora en esta estación invernal en Israel, mientras que a las cuatro organizaciones de salud les quedan apenas un remanente 150 mil vacunas, de acuerdo con un informe del diario Yediot Aharonot.
Según los reportes, numerosas personas han sido rechazadas en las sucursales de las organizaciones de salud debido a la escasez de vacunas o han desistido debido a las largas colas.
Once personas murieron por la gripe desde el comienzo de la estación invernal 2018-2019, según el Ministerio de Salud, en comparación con 17 que fallecieron el año pasado.