Reapertura y nuevo local propio
El Teatro “Malenki” reanudará sus actividades a partir del 17 de julio después de estar congelado durante tres meses debido a la crisis de Coronavirus. El regreso de este teatro a la rutina es particularmente emocionante a la luz del hecho de que el teatro vuelve a funcionar pero en su nueva residencia, a la que se mudó hace solo unos meses.
El “Malenki, Clásico y Contemporáneo”, fundado en 1997 y dirigido por Michael Teplitsky, es una institución que se dedica a poner en escena famosos clásicos literarios. Un teatro que se ha especializado en la adaptación y la interpretación muy moderna de piezas famosas, todo con interpretación israelí renovada y moderna. Desde el principio encontró un nicho propio y desde el primer espectáculo se determinó que las representaciones se realizaban en hebreo para que se convirtieran en una verdadera parte de la cultura Israelí.
Esta es la primera vez en 23 años que el teatro tiene su propia casa. El teatro tiene la “Sala Black Box”, una sala modular que se puede adaptar a cualquier actuación según sus necesidades. El «Malenki necesita una sala que combine con la naturaleza del teatro que renueva el lenguaje con cada presentación, pero con una libertad de expresión artística. Para ello se ha invertido en iluminación y multimedia, y reclutado un equipo profesional, que instaló cuatro proyectores trabajando simultáneamente, contribuyendo así a la nueva experiencia teatral.
La actividad teatral se reanudará con el estreno de la obra “Warsaw Melody” (Melodía de Varsovia), una historia de amor basada en la obra de Leonid Zorin, que se ha presentado con éxito en muchos escenarios de todo el mundo. Es una leyenda urbana sobre dos personas que se conocieron y rompieron en circunstancias dolorosas. En la adaptación del Teatro Malenki, la trama tiene lugar en Israel de 1991, la Primera Guerra del Líbano. Una joven cantante de ópera polaca y un enólogo israelí se enamoran en un encuentro accidental, pero ella tuvo que regresar a su país porque su visa había expirado y él fue reclutado de emergencia.
El director es Michael Taplinsky, quien le dio su propia interpretación personal y separó la trama de su componente ideológico. En la obra original, la trama tiene lugar en Rusia bajo un gobierno que aplasta los deseos de las personas, pero Teplitsky no enfoca estos límites externos sino los que las establecen para sí mismos, los que están dentro de ellos. Los héroes de Teplitsky no pudieron cumplir su amor no porque fueron prohibidos, sino por sus limitaciones emocionales. Se presenta el 17 y 18 de julio.
Otra obra del repertorio del Teatro Malenki que vuelve a escena en estos días se titula “Leyenda de la nieve”. Como otras piezas infantiles de su repertorio es un espectáculo mágico para toda la familia que se presenta en un ambiente cálido y acogedor. Esta pieza cuenta a través de marionetas y objetos, las vicisitudes de un pequeño y valiente muñeco de nieve emprende un viaje para evitar que el sol llegue y para mantener el invierno. Declara “Cuando llegue el sol me derretiré. Entonces iré al sol y le diré que no venga”. Durante su viaje, se encuentra con nuevos amigos, los habitantes de los bosques, y descubre cosas nuevas sobre el mundo, sobre la naturaleza y especialmente sobre sí mismo. Basado en una historia rumana de Greta Wilk “El sol y los muñecos de nieve”. Se presenta en el mes de agosto.
Fotos Mark Tso