Por el Dr. Yehoshua Kalisky
La operación de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) que comenzó el lunes 3 de julio a la 01:10 es un ejemplo de una ejecución brillante y de alta tecnología de las fuerzas terrestres y aéreas, con una sincronización temporal precisa basada en una planificación creativa e inteligencia cualitativa.
En la Operación Hogar y Jardín, las FDI integraron VAN (vehículos aéreos no tripulados) para la recopilación de inteligencia, la observación continua del campo de batalla, la cobertura y el ataque preciso a objetivos cualitativos.
El golpe inicial fue llevado a cabo por drones de ataque que infligieron daños críticos a través de armamentos de precisión en el cuartel general conjunto de las organizaciones terroristas, negándoles las capacidades de observación, control y supervisión del comando.
Posteriormente, se llevaron a cabo ataques de precisión adicionales desde el aire sobre comandancias y centros terroristas, en paralelo con las operaciones ofensivas de las fuerzas de ingeniería e infantería.
Lo especial de la actividad de las FDI en la operación es la multidimensionalidad y el aspecto tecnológico del ataque, en una sofisticada integración de medidas de control y supervisión, flexibilidad en la planificación y ejecución, sincronización entre las fuerzas y mucha precisión en la localización y eliminación de objetivos relevantes con bajas mínimas en nuestras fuerzas.
Fuente: INSS – The Institute for National Security Studies
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