Los rebeldes hutíes anunciaron la destitución del Gobierno que habían formado en Saná los propios insurgentes con sus aliados en 2016, tras expulsar al gobierno internacionalmente reconocido de la capital yemení, informó en un comunicado su Consejo de Defensa.
El Consejo dijo que el actual gobierno encabezado por Abdulaziz bin Habtoor fue destituido, sin dar ningún tipo de explicación sobre esta decisión, y añadió que de momento actuará como gobierno interino «para manejar los asuntos públicos ordinarios» hasta que se forme un nuevo Ejecutivo.
Horas antes, el máximo líder del grupo, Abdul Malik al Huthi, dijo en un discurso televisado que ordenaría la formación de un nuevo gobierno tecnócrata.
Los hutíes, alineados con Irán, controlan la capital, Saná, y gran parte del noroeste del país desde que se inició el conflicto en 2014, lo que obligó al gobierno yemení internacionalmente reconocido a desplazarse a Adén, en el sur del país.
Este grupo de rebeldes chiíes formaron el gobierno actual en noviembre de 2016 en asociación con el Partido Popular General, fundado por el expresidente del país Ali Abdullah Saleh, a quien ejecutaron un año después.
Arabia Saudí intervino en la guerra del Yemen en 2015 como líder de una coalición militar en apoyo al Gobierno en el conflicto, que ha provocado la peor catástrofe humanitaria en el planeta, según la ONU, que estima que hay más de 23 millones de personas necesitadas de asistencia.
Esta pasada semana, representantes del Gobierno de Arabia Saudí y de los hutíes concluyeron la segunda ronda de conversaciones en Riad para llegar a un acuerdo que ponga fin a la cruenta y larga guerra en el Yemen, del que no trascendieron detalles más allá de una valoración positiva por ambas partes.
Con información de agencias.