La compañía israelí Aleph, que se basa en capital de riesgo, recaudó un fondo de 300 millones de dólares para invertir en nuevas empresas. El cuarto fondo de este tipo, Aleph IV, aportó alrededor de 850 millones de dicha divisa en activos bajo gestión.
Según una publicación de su CEO Michael Eisenberg, la firma busca asociarse con “emprendedores israelíes ambiciosos que desean construir compañías grandes y significativas y marcas globales impactantes de Israel”. Y agregó: “Estaríamos abiertos a trabajar con compañías remotas también, siempre que podamos agregar valor con nuestra red, plataforma y conocimiento de Israel».
En total, Aleph invirtió en más de 36 empresas, como WeWork, Lemonade, JoyTunes, Honeybook y Melio, entre tantas otras. Por su parte, Eisenberg también añadió que “Aleph está dedicado a acelerar las startups para escalar y trabajar juntos para transformar las industrias y el mundo”.
Este drástico cambio en inversiones israelíes se dio cuando el ecosistema tecnológico de dicho país concluyó un récord anual en financiación. A su vez, también se produjo un récord en “salidas”, acuerdos de función y adquisición u ofertas públicas iniciales de acciones.
Entre enero y noviembre de 2021, compañías israelíes juntaron más de 25 mil millones de dólares. Además, las empresas tecnológicas vieron cómo las salidas subieron un 520% este año a un valor sin precedentes de 81,2 mil millones de dólares.