Raisí cumple un año de poder con veloz carrera nuclear y decepción social

Ebrahim Raísi Foto: Meghdad Madadi Tasnimnews Agency CC BY 4.0

Raisí tomó posesión como el octavo presidente de la República Islámica de Irán el 5 de agosto de 2021, tras imponerse en las elecciones presidenciales con casi el 62 % de los votos ante la falta de contrincantes de peso y una alta abstención.

En su primer discurso como mandatario iraní, el conservador clérigo pidió la eliminación de las sanciones estadounidenses a través de la diplomacia para levantar la deprimida economía local, que alimenta la insatisfacción popular, pero advirtió a al vez que su país “no cederá ante la presión”.

Un año más tarde las sanciones estadounidenses permanecen sin modificación, el programa nuclear iraní sigue avanzando y el descontento popular por la mala situación económica se ha reflejado en las calles con varias protestas.

“Este Gobierno no ha podido cumplir con sus promesas económicas, sociales, medioambientales, laborales e incluso de seguridad”, explica el catedrático de Ciencias Políticas de la Universidad Azad de Teherán, Mehdi Motaharnia.

PROGRAMA NUCLEAR

El analista político considera que el acuerdo nuclear “se ha convertido en una crisis para el Gobierno” por no salvar el pacto de 2015, lo que podría aliviar la situación económica.

El acuerdo nuclear de 2015 limitaba el programa nuclear iraní a cambio del levantamiento de las sanciones, pero en 2018 el entonces presidente estadounidense Donald Trump lo abandonó unilateralmente y volvió a imponer sanciones económicas contra Irán.

Tras cinco meses de parón, Irán reanudó ayer en Viena las negociaciones con Rusia, China, Francia, Reino Unido y Alemania, además de Estados Unidos de forma indirecta, para tratar de cerrar un acuerdo.

Las cuestiones fundamentales del acuerdo están cerradas, según la Unión Europea, pero quedan asuntos bilaterales entre Teherán y Washington, como las sanciones contra la Guardia Revolucionaria iraní o garantías de que EEUU no abandonará de nuevo el acuerdo.

Ante el “impasse”, el jefe de la Agencia de la Energía Atómica de Irán (AEAI), Mohamad Eslamí, afirmó el lunes que Irán tiene la capacidad técnica para producir una bomba atómica, pero que no tiene intención de hacerlo.

Un día después el director del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, confirmó la potencia del programa nuclear de Irán, que avanza «muy, muy rápidamente», tanto en capacidad como en “ambición”.

DESCONTENTO SOCIAL

La falta de un acuerdo que elimine las sanciones estadounidenses no ayuda a la economía iraní, golpeada por una galopante inflación en torno al 40 %, que ha alentado protestas por la subida de precios y la carestía de la vida a lo largo del país.

En mayo hubo protestas en varias ciudades por la subida del precio del pan y otros alimentos básicos por la eliminación de subsidios del Gobierno, que se cobraron la vida de al menos cuatro personas en choques con las fuerzas de seguridad, según Amnistía Internacional.

Pero no han sido las últimas protestas en los últimos meses.

A finales de mayo cientos de personas protestaron durante días en la sureña ciudad de Abadan por el colapso de un edificio que causó 43 muertos, unas manifestaciones que fueron duramente reprimidas por las autoridades.

A ello se sumaron protestas de jubilados que pedían una subida de sus salarios, las manifestaciones de profesores que desde hace meses piden aumentos en sus sueldos o las de ciudadanos en varias ciudades como Isfahan por la sequía.

Todo esto es un reflejo del descontento social ante la falta de perspectivas económicas, según Motaharnia.

“Hay un alto descontento y una violencia acumulada que se expresa en protestas”, afirma el profesor universitario.

Raisí no ha celebrado ningún acto ni dado un discurso para conmemorar su primer año en el poder.

En lugar de ello, el presidente se limitó a recordar el apoyo de Irán a los palestinos y alabó el “luminoso camino de la resistencia” frente al “enemigo” declarado del régimen islamista, es decir, Israel. EFE y Aurora

Compartir
One thought on “Raisí cumple un año de poder con veloz carrera nuclear y decepción social”

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.