¿Quién dominará el paisaje cuando caiga el Estado Islámico en Irak y Siria?

20 marzo, 2017

Jonathan Spyer

Sobre la superficie, las guerras en Siria e Irak continúan con toda su intensidad. La lucha entre las fuerzas del gobierno iraquí y el Estado Islámico en el oeste de Mosul está demostrando ser un trabajo duro lento y difícil. Recientemente, las fuerzas del gobierno capturaron la jefatura de la policía y el complejo de los tribunales en la ciudad, moviéndose hacia el laberinto más denso de la ciudad vieja. Los jihadistas están luchando por cada centímetro de terreno. Más hacia el oeste, las Fuerzas Democráticas de Siria (FDS) apoyadas por Estados Unidos lograron exitosamente cortar la última carretera que une Raqqa, la capital del Estado Islámico, con su baluarte en Deir al Zur.

En la lucha entre el régimen de Assad y la rebelión sunita, un intento rebelde de contraataque en la ciudad de Deraa ha dado lugar a nuevos derramamientos de sangre. El régimen continúa sus ataques contra Ghouta Oriental al este de Damasco, en manos de los rebeldes, a pesar del nuevo alto el fuego mediado por Rusia.

Pero mientras los combates tácticos continúan; la dirección general de los acontecimientos, tanto en la guerra contra el Estado Islámico como en la lucha entre Assad y los rebeldes es ahora clara.

El Estado Islámico está en camino de dejar de existir como una entidad que controla un territorio significativo. Este proceso va a continuar muchos meses. Pero el Estado Islámico, tras haber perdido decenas de miles de combatientes y con el flujo de nuevos reclutas secándose, y enfrentándose a enemigos que tienen el completo control de los cielos y una inmensa superioridad numérica y material, no tiene medios para revertir la tendencia.

Por su parte en la guerra de Assad más al oeste, la rebelión está en retirada y su eventual eclipse parece una certeza cercana. El régimen, con sus aliados iraníes, rusos y Hezbollah, está actualmente tratando de reducir y destruir los enclaves aislados de los rebeldes situados en medio del territorio controlado por el régimen en el oeste de Siria. De ahí los ataques a Ghouta oriental, y a Waer en la zona de Homs. Una vez hecho esto, las fuerzas pro-régimen bien pueden poner su atención en el suroeste de Siria, y eventualmente también a la provincia norteña de Idleb, controlada por los rebeldes.

siria ataque

El régimen también está participando en la guerra contra el Estado Islámico. Las fuerzas del gobierno llegaron al río Éufrates, después de barrer todo el territorio controlado por el Estado Islámico en el este la campiña de Alepo.

A medida que se aclara la dirección de los acontecimientos, surge la posibilidad de que la alianza liderada por Irán logre una victoria total en las guerras de Irak y Siria.

Tal victoria constituiría de por sí un logro para Assad. Pero las propias fuerzas del dictador sirio son totalmente dependientes de los avances en la Guardia Revolucionaria iraní, Hezbollah, las milicias chiíes iraquíes y las formaciones paramilitares creadas por los iraníes, durante los últimos cinco años, para hacer frente a la escasez de efectivos del régimen. Es decir, el verdadero poder detrás de tal victoria serían las fuerzas dispuestas por Irán sobre el terreno. Estos, a su vez, sólo son capaces de avanzar en cooperación con la fuerza aérea rusa, como los acontecimientos en Alepo y el noroeste lo han demostrado.

Tal resultado es aún distante, y no es absolutamente una certeza. Pero ya no es una imposibilidad, y los planificadores israelíes y estadounidenses estarán notando su viabilidad, y la búsqueda de formas de prevenir o reducir su impacto.

¿Cómo se vería tal victoria?

También incluiría los siguientes elementos: en primer lugar, el régimen de Assad tendría éxito en terminar o reducir severamente las áreas restantes en poder de los rebeldes sunitas y los islamistas en la parte occidental del país. En segundo lugar, tras la destrucción de las zonas controladas por el Estado Islámico en el este de Siria, las fuerzas del régimen con el apoyo de la fuerza aérea rusa tendrían éxito en dirección al este, desafiando o cooptando a los kurdos y al resto de las fuerzas rebeldes en la zona, y alcanzando la frontera sirio-iraquí.

8spyer siria combate

En tercer lugar, tras la reducción o destrucción del Estado Islámico en la provincia de Ninawah (Nínive), las milicias chiís iraquíes organizadas en el marco de las Unidades de Movilización Popular (UMP) permanecerían armadas, convirtiéndose en una característica permanente del paisaje político y militar iraquí.

A fines de noviembre, el Parlamento iraquí aprobó una ley que convierte al UMP en una parte permanente de las fuerzas de seguridad iraquíes. Los cien mil combatientes de la UMP no consisten únicamente en elementos pro-iraníes. Pero las principales milicias y estructuras de comando están de facto en manos de las fuerzas pro-iraníes. Más significativamente, el Cuerpo Badr, liderado por Hadi al Ameri. y el grupo Ktaeb Hezbollah, comandando por Abu Mahdi Al Muhandis, están directamente vinculados a la Guardia Revolucionaria de Irán.

Las milicias se encuentran ahora situadas al oeste de la ciudad de Mosul, cerca de la urbe de Tel Afar. Si las fuerzas del régimen empujan hacia el este, van a unirse en la frontera con sus camaradas de la UMP, la creando un área contigua masiva de territorio controlado de facto por Irán, todo a lo largo, desde la profundidad interior de Irak a través de Siria y el Líbano.

Así es como se vería la victoria para el lado aliado de Irán en las guerras en Siria e Irak. ¿Cómo puede prevenirse?

Los avances del lado iraní son sólo posibles con el apoyo de la fuerza aérea rusa. Y los objetivos rusos en Siria (Irak es menos significativo para Moscú) no necesariamente encajan con los de Teherán. Irán quiere la victoria total, la reunificación de Siria bajo el control nominal de Assad, y el surgimiento de las milicias chiís lideradas por Irán como dueños del poder clave en Irak.

Moscú ha tenido y tiene objetivos mucho más limitados. Los rusos en Siria querían evitar la derrota de Assad, asegurar sus recursos navales en el Mediterráneo y convertirse en el mediador principal en el subsecuente conflicto congelado o semi-congelado.

Hay una gran brecha entre estas dos agendas, y trabajar en su ampliación debería ser el asunto más importante en la mente de los responsables políticos occidentales e israelíes.

Los rusos tienen que entender que, si bien sus propios intereses son percibidos como vitales en Siria pueden ser acomodados; la agenda de Irán mucho más ambiciosa en la zona cruza las líneas rojas occidentales e israelíes, y por lo tanto no se le permitirá alcanzar sus objetivos. Sin los rusos, los esfuerzos occidentales e israelíes para contener y hacer retroceder a los iraníes pueden proceder a buen ritmo.

Esto se puede lograr a través de una combinación de esfuerzos diplomáticos y hechos sobre el terreno. Respecto al primero, el primer ministro, Biniamín Netanyahu, en su visita a Rusia, presumiblemente habrá dejado en claro al presidente ruso, Vladimir Putin, que las líneas rojas de seguridad de Israel con respecto a la creación por parte de Irán y Hezbollah de un nuevo frente de conflicto al este del Paso de Quneitra, y con respecto a la necesidad de prevenir bases permanente iraníes en el oeste de Siria, son serias, se aplicarán, y pueden alcanzarse sin ninguna amenaza para los intereses vitales de Rusia.

Respecto a lo último, hasta el momento, la fuerza clave en la lucha contra el Estado Islámico en Siria es el FDS, alineado con Estados Unidos. Los últimos informes indican que elementos del 75° Regimiento Ranger  y de la 11° Unidad Expedicionaria de la Marina de Estados Unidos están desplegados en el este de Siria, para apoyar la lucha contra el Estado Islámico en esta área.

La apropiación del este de Siria por parte de EE.UU. y sus aliados en el periodo post-Estado Islámico es la mejor manera de prevenir la posibilidad de la realización de los objetivos de Irán, al tiempo que presenta a Rusia con un hecho consumado. Las indicaciones son que la Administración estadounidense está pensando en estos términos. Si es así, la victoria iraní, emergiendo sobre las ruinas de Siria e Irak, puede ser prevenida.

El paisaje post-Estado Islámico en Irak y Siria está emergiendo. La disputa por la supremacía dentro del mismo está a punto de empezar.

Fuente: Jpost.com

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5 thoughts on “¿Quién dominará el paisaje cuando caiga el Estado Islámico en Irak y Siria?”
  1. Poco a poco va tomando forma el ajedrez, de acuerdo a la Biblia, vamos a ver una alianza entre Rusia, Siria e Irán. De manera asombrosa ya lo estamos viendo. El propósito de esta alianza es una maniobra satánica para destruir a ISRAEL. Dios bendiga y guarde a esta gran nación.

  2. Hugo,otro comentario antisemita de tu parte.Estas repitiendo lo que dicen tus compatriotas nazis.Que Israel creo el ISIS.Por otro lado no son varias personas los que escribieron el articulo.Jonathan Spyer es una sola persona.Lee de vuelta el articulo,hacete el favor.

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