Tres combatientes de un grupo leal a la organización terrorista libanesa chií Hezbollah fueron abatidos en las primeras horas del miércoles en una escuela de la aldea de Al Huriyyah en el norte de la provincia de Quneitra, en el sur de Siria, de acuerdo con el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
El Observatorio, una organización no gubernamental con sede en Londres, pero que cuenta con una amplia red de activistas en el terreno, indicó que los tres milicianos eliminados eran miembros de la “Resistencia Siria para Liberar el Golan”, un grupo creado por Hezbollah, que a su vez responde a los designios de Irán.
El Observatorio añadió que uno de los milicianos fallecidos era un ciudadano sirio, mientras que la nacionalidad de los otros dos no ha sido aclarada.
El Observatorio destacó que Hezbollah y las milicias pro-iraníes son muy activas en la zona rural de Quneitra, donde se han registrado reiterados ataques en los últimos años, no lejos de la frontera con Israel.
Las Fuerzas de Defensa de Israel no suelen hacer comentarios sobre este tipo de incidentes, y mantienen una “política de ambigüedad” con respecto a sus actividades militares contra Irán y sus aliados en Siria.
Sin embargo, el ministro de Defensa, Benny Gantz, pareció insinuar el miércoles que Israel tuvo alguna relación con la fuerte explosión en el sur del país árabe vecino.
«No voy a entrar en quién disparó qué anoche. No permitiremos que agentes terroristas de Hezbollah o Irán se establezcan en la frontera de los Altos del Golán y haremos lo que sea necesario para expulsarlos de allí», apuntó Gantz al ser entrevistado por la radio pública Kan.
Cuando se le preguntó si esa ha sido la razón detrás del presunto ataque israelí, Gantz respondió vagamente: «Escuche, pasan cosas».