El ministro de Economía Eli Cohen (del partido Kulanu, liderado por el ministro de Finanzas Moshé Kahlón), fue invitado en el estudio de televisión del periódico Israel Hayom, y se refirió a la crisis en Teva: “Los trabajadores de Teva no son los que tienen que pagar el precio de las fallas de la compañía en el extranjero”. Hizo un llamamiento a la gerencia de la empresa: «Las líneas de producción deben devolverse a Israel luego de que el dinero israelí se ha utilizado para inversiones en el extranjero”.
“Hemos estado en conversaciones en los últimos días con la administración de Teva, con el objetivo de arreglar el problema”, dijo, y agregó que “nuestra sensibilidad es mucho más alta para las fábricas en la periferia, como Kiriat Shmona y Neot Hovav”.
El ministro se refirió a la gestión del gigante farmacéutico que provocó la crisis: “Teva se ha beneficiado de beneficios fiscales y subvenciones en Israel, de desarrollos de medicamentos en Israel como Copaxone, que contribuyó con miles de millones de dólares para inversiones en el extranjero. Comprendemos el momento difícil de Teva, pero al mismo tiempo debemos actuar con sensibilidad frente al Estado de Israel, que fue la fuente del desarrollo de Teva en el mundo”, declaró.
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