Aunque, la Knéset se encuentra actualmente en receso de verano, fue convocada a una reunión especial iniciada por la oposición, llevada a cabo con la firma de veinticinco diputados.
Únicamente cinco miembros de la coalición se presentaron al debate, entre tanto el primer ministro Biniamín Netanyahu, estuvo notablemente ausente.
La líder recientemente nombrada de la oposición, Tzipi Livni, que abrió el debate, se disculpó ante los miembros de la comunidad drusa “No me disculpo sólo, por la ley problemática y discriminatoria, sino por el hecho de que Netanyahu no estuvo presente para la discusión, para hablar y para dar respuestas no solamente a la comunidad drusa, sino a todo el Estado de Israel”, manifestó Livni.
El diputado Ahmad Tibi, lamentó el hecho de que “los ciudadanos que tienen todo se elevan por encima de otros grupos, un colectivo con un alto estatus, y debajo de está todo aquel que no es judío y no tiene derechos. Solo hay una mención de los árabes en esta ley, y es negativa: cancela el estado del idioma árabe”. Manifestó.
A principios de esta semana, el comité especial formado para encontrar una solución a la crisis con la comunidad drusa sobre la Ley de nacionalidad se reunió por primera vez, con sólo cinco de los 13 ministros asignados.
El sábado por la noche, más de 90,000 miembros de la comunidad drusa y sus partidarios se reunieron en la Plaza Rabin en Tel Aviv para realizar una manifestación contra la Ley Nacional.
Si esta mujer nefasta sigue en la política israelí quiere decir que algo mal se hizo. Esta mujer es IMPRESENTABLE y una vergüenza nacional.
La pusieron ahí porque es una trepadora inmoral y sin vergüenza, a hacer una labor de zapa que ningun politico decente querría hacer. Esta infame politiquera, al servicio de los más oscuros y repugnantes intereses de la zurda antijudía y anti-israelí, no tiene ningún óbice en falsear y deformar hechos mostrando así su catadura moral, tratando de destruir a un gobierno legítimo que lucha incansablemente por solucionar problemas que ella misma creó cuando se le dio la oportunidad de realizar un trabajo serio y responsable donde demostró ser una absoluta y total irresponsable.
Su fracaso fue tan espantoso y dañino para los intereses israelíes que desesperada buscó refugio en la zurda israelí donde fue recogida más por lástima que por los escasos votos que aportó y hoy la mandan al frente para aprovechar sus indudables dotes para, con malicia y un cinismo mayusculo, distorsionar los hechos en forma artera, mendaz, hipócrita y tendenciosa.
La senora no le interesa en nada a Israel como pueblo, no hay que hablar nada de ella.