La policía interrogó por tercera vez al propietario del principal grupo mediático del país, el Yediot Aharonot, por una entrevista con el primer ministro, Biniamín Netanyahu, en la que ambos podrían haber incurrido en un posible delito de intercambio de favores.
El interrogatorio del empresario, Arnón (Noni) Mozes, se prolongó durante ocho horas, y sigue a la publicación este fin de semana por varios medios de nuevos contenidos de la entrevista.
En ella, Netanyahu pidió a Mozes que su influyente periódico deje de acosarle y rebaje la crítica de «9,5 en la escala de Richter a 7,5», entre otras vías mediante la contratación de periodistas de tendencia derechista.
El empresario le insta a que le dé nombres y le pide a cambio una ley que limite las actividades del diario Israel Hayom, afín al gobierno y que ha cambiado todo el mercado local de la prensa por su condición de gratuito, informó el Canal 2 de la televisión.
El primer ministro le responde que tendría que consultarlo con el «pelirrojo», en alusión al magnate judío-estadounidense Sheldon Adelson, que creó el diario la década pasada para impulsar la carrera política de Netanyahu.
El primer ministro, que ha sido interrogado por otros casos de corrupción, se refirió a las acusaciones y dijo en una reunión con su partido Likud que «como en otros expedientes tampoco de este saldrá nada, porque no hay nada». EFE
Lo de los regalos, si se limita a cigarros, no es de demasiada importancia, amen de la prensa y en especial la zurda para colgarle una mancha a Bibi. Pero cuando son conversaciones de “favoritismo” entre el dueño de un diario y un primer ministro, la cosa cambia. Se debe investigar si hubo la famosa “proteccia” Israeli, (hoy por ti, mañana por mi) o la simple “coima argentina” se transforma legalmente en el delito de COHECHO. Esto se debe investigar hasta el fin, caiga quien caiga