Desde el comienzo del conflicto entre Hamás e Israel, el 7 de de octubre de este año, se registró en todo el mundo un aumento de los incidentes antisemitas y las amenazas contra instituciones dentro de la comunidad. Es por esto que todas las instituciones judías, ya sean sinagogas, escuelas, o centros comunitarios, se vieron obligadas a incrementar las medidas de seguridad.
La semana pasada, en una sola noche, 15 sinagogas en Nueva York recibieron amenazas de bomba. Este miércoles, el centro judío AMIA en Buenos Aires, lugar de lo que se considera el atentado contra la comunidad judía más sanguinario fuera de Israel luego de la Segunda Guerra Mundial, recibió también una amenaza de bomba.
Las autoridades llevaron a cabo una búsqueda en el lugar y determinaron que la amenaza era una falsa alarma. Las operaciones del edificio continuaron normalmente durante la búsqueda, según informó el Buenos Aires Herald.
La amenaza se llevó a cabo a través de correos electrónicos, desde distintos usuarios, en el que se afirmaba que iban a tirar bombas en la AMIA y en la DAIA. Además, los mails contenían frases violentas y antisemitas, como “muerte a los judíos sionistas.
La policía local ya está trabajando en la investigación de los correos para hallar su origen y así identificar a los responsables de estas amenazas. Argentina se encuentra dentro de los países que al día de hoy Israel considera de “nivel 2”, es decir, que los israelíes que estén allí deben tomar ciertas precauciones.
Posiblemente en 10 años estén cerca de atrapar al culpable