Finalmente, la Autoridad Palestina canceló el acuerdo que se había alcanzado con Israel respecto a la provisión de vacunas. En conferencia de prensa, el portavoz Ibrahim Melhem reconoció la decisión de Ramala.
«Luego de que los equipos técnicos del Ministerio de Salud examinaran el primer lote de las vacunas Pfizer que se recibieron esta tarde de Israel, estimadas en 90.000 dosis, se encontró que no se ajustan a las especificaciones contenidas en el acuerdo«, explicó Melhem, según consignan desde la agencia oficial WAFA.
El lote regresó a Israel. El problema está en la fecha de caducidad de las vacunas, que desde Ramala aducen que es muy cercana. La Autoridad Palestina espera «que las vacunas se suministren directamente de la empresa matriz en lotes de acuerdo con el acuerdo celebrado con ella en relación con la compra directa”.
Desde Israel no hubo respuesta oficial. Igualmente, desde la emisora Galei Tzahal aseguraron que fuentes del Ministerio de Salud se mostraron incrédulas. «No sabemos qué quieren. Las vacunas están bien», habrían dicho desde la cartera que conduce Nitzan Horowitz.
El tema del vencimiento había sido reconocido por Israel. De todos modos, la caducidad no era inmediata, y había suficiente tiempo para avanzar con la inoculación.
El acuerdo incluía el préstamo de un millón de dosis de la vacuna de Pfizer, que sería devueltas luego a Israel.