El movimiento terrorista islámico al-Shabab perpetró un sangriento atentado terrorista en Kenia esta semana.
En el atentado, llevado a cabo en un lujoso hotel y complejo de oficinas en Nairobi, fueron asesinadas 14 personas. El Departamento de Estado de EEUU confirmó que una de las víctimas era el americano Jason Spindler.
Spindler era miembro de la comunidad judía y era el CEO de una compañía de consultoría. Fue asesinado durante una reunión de trabajo en el lugar.
Su hermano, Jonathan Spindler, escribió en las redes sociales: «Con inmensa tristeza anuncio que mi hermano, Jason Spindler, murió esta mañana en un ataque terrorista en Nairobi. Jason fue sobreviviente del 11 de septiembre y era un luchador».
Según NBC News, su madre Sarah Spindler, dijo que su hijo «estaba tratando de hacer un cambio positivo en el mundo en mercados emergentes». Asimismo agregó que «es realmente triste que una persona tan joven y brillante sea despojado por el terrorismo».
El presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, confirmó que «todos los terroristas fueron eliminados» tras un operativo nocturno para localizarlos y abatirlos.
Al-Shabab, una organización terrorista relacionado con al-Qaeda, se responsabilizó por el atentado en el complejo DusitD2. Este movimiento terrorista ha llevado a cabo otros atentados en el país como el ataque en el año 2013 en el centro comercial Westgate en Nairobi donde fueron asesinadas 67 personas.