Tanto Israel como Estados Unidos se negaron a comentar el informe que indica que el gobierno israelí detuvo la venta de armas al ejército de la República de Myanmar (Birmania).
La ONU y organizaciones de derechos humanos acusaron a los militares de Birmania de cometer limpieza étnica contra la minoría rohingya musulmana del país.
El sitio web de noticias de inteligencia y diplomacia informó que tras la presión de los EE.UU., Israel había decidido detener toda venta de armas a Myanmar.
Según informaciones anteriores las ventas de armas continuaron inclusive después de conocerse públicamente el alcance de los crímenes cometidos contra la población rohingya.
El ministro de Defensa, Avigdor Liberman, tomó una decisión sobre el asunto luego de las conversaciones con funcionarios de los EE.UU.