Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) demolieron varios edificios en el este de Jerusalén construidos en forma ilegal, cerca de la valla de seguridad, una movida que fue condenada por la Autoridad Palestina (AP), que la consideró como una “grave escalada”.
Cientos de agentes de la Guardia de Frontera y soldados de las FDI arribaron al lugar conocido como Wadi al Hummus (Valle del Garbanzo) alrededor de las 4:00 a.m. para ejecutar la operación que duró varias horas.
La demolición de infraestructura palestina construida sin los permisos requeridos no es infrecuente. Sin embargo, algunas de las estructuras edilicias demolidas, varias de las cuales estaba aún en construcción, se encontraban en la zona A, es decir bajo el control de la Autoridad Palestina (AP), en Cisjordania (Judea y Samaria).
Israel indicó que las diez estructuras edilicias del vecindario de Sur Baher estaban en una zona donde está prohibida la construcción debido a la proximidad a la valla de seguridad. La emisora estatal Kan dijo que las estructuras contienen 72 unidades residenciales.
Los palestinos dicen que las preocupaciones de seguridad son un pretexto para tratar de empujarlos fuera de la zona de Jerusalén y sostienen que es casi imposible recibir los permisos para construir por parte de las autoridades israelíes lo que conduce a un déficit habitacional en los barrios árabes de la ciudad.
El mes pasado, la Corte Suprema de Justicia rechazó un pedido de los habitantes palestinos reclamando que se cancele la orden militar que prohíbe la construcción en la zona.
La oficina del presidente palestino, Mahmud Abbás, responsabilizó a Israel por esta “grave escalada”.
“Esto es parte del ‘Acuerdo del Siglo’ que busca terminar con la cuestión palestina”, agrega el comunicado de la AP en referencia al plan de paz del presidente estadounidense Donald Trump.