Israel empezó a aplicar desde hoy, viernes, hasta el domingo por la noche un cierre general en los cruces de Gaza, Judea y Samaria con motivo de la festividad de Rosh Hashaná, el año nuevo judío.
Este tipo de medida es usual durante la celebración de fiestas religiosas judías de envergadura.
El cierre entró en vigor hoy desde la medianoche y, «sujeto a una evaluación de seguridad, se levantará el domingo 17 de septiembre», informaron el Ejército israelí y el COGAT, organismo militar que gestiona asuntos civiles en esa zona.
Los pasos sí «estarán abiertos a los palestinos en circunstancias especiales y únicamente por motivos humanitarios», siempre que hayan recibido previamente una aprobación del COGAT.
Todo ello se produce en medio de una fuerte escalada de tensión, que este 2023 vive su año más mortífero desde la Segunda Intifada (2000-2005) y que ha tenido su epicentro en Judea y Samaria con permanentes ataques terroristas contra israelíes.