El ministro de Exteriores israelí, Eli Cohen, viajará a Turkmenistán para abrir una embajada del Estado judío en Ashgabat, una representación diplomática que se ubicará a solo unos kilómetros de Irán, archienemigo de Israel, confirmó a Efe la cancillería.
La embajada será inaugurada el jueves, y la última visita de un ministro israelí a Turkmenistán «fue en 1994», dijo un portavoz del Ministerio de Exteriores de Israel.
La nueva oficina diplomática estará ubicada en la capital de Turkmenistán, Ashgabat, a solo una treintena de kilómetros de la frontera noreste de Irán, que se extiende por más de 1.000 km.
Se espera que Cohen se reúna con el presidente y el canciller turkmenos, Serdar Berdimuhamedov y Rashid Meredov, respectivamente, así como con la comunidad judía local.
En las últimas décadas, Irán se ha convertido en el máximo enemigo de Israel en la región, y ambos países están envueltos en una guerra encubierta que ha derivado en ciberataques, ataques contra barcos de propiedad israelí en el Golfo pérsico o bombardeos por parte de Israel contra posiciones iraníes en Siria.
En 1994, el entonces canciller israelí, Shimon Peres, visitó Turkmenistán tres años después del colapso de la Unión Soviética, que había gobernado el área, rica en petróleo.
Israel ya había tenido un embajador en Ashgabat durante una década, pero trabajaba en hoteles y en una oficina temporal, según medios israelíes.
Cohen se encuentra actualmente en Azerbaiyán, al otro lado del Mar Caspio, frente a Turkmenistán.
En Bakú, se reunió con el presidente azerí, Ilham Alíev, para hablar sobre los desafíos estratégicos comunes, como la seguridad regional y la lucha contra el terrorismo, indicó la cancillería israelí.
En marzo, Azerbaiyán inauguró una embajada en Tel Aviv, convirtiéndose así en el primer país musulmán chií en contar con una sede diplomática en Israel.
«La apertura de la embajada fortalecerá aún más la seguridad, la alianza política y económica entre nosotros”, dijo Cohen, que viaja con una delegación de 30 empresas israelíes de los sectores de seguridad nacional, seguridad cibernética, agua y agricultura.
Israel y Azerbaiyán mantienen relaciones diplomáticas desde hace más de 30 años e Israel tiene una embajada en Bakú desde 1993.
El lazo entre ambos es especialmente sólido en materia de seguridad, siendo Israel uno de los principales exportadores de armamento a Azerbaiyán, que a su vez provee a Israel con petróleo.
El país del Cáucaso ya contaba con una oficina comercial y una de turismo en el Estado judío y, según medios israelíes, la decisión de abrir una embajada se demoró por temor a represalias de Irán, con quien comparte fronteras.
Israel se opone fervientemente al programa nuclear iraní, y en caso de que Israel decidiera atacar reactores y plantas iraníes, el acceso a las bases aéreas de Azerbaiyán sería de una considerable utilidad.
Las relaciones también son tensas entre Azerbaiyán e Irán, que siendo hogar de millones de personas de origen azerí, acusa a Azerbaiyán de alimentar el sentimiento separatista en su territorio.
Con información de Efe
Muy interesante – hay que abrirse y crear lazos estables con dirigentes de paises inteligentes capaces y con apertura mental pacifista y de avanzada- ni retrogados