Las autoridades sanitarias indicaron que el coeficiente de contagio al 6 de marzo (este dato se obtiene siempre con un atraso de diez días) fue de 0.68.
Este número está muy por debajo del coeficiente de reproducción 1.0 R, que indica el nivel de propagación que el virus necesita para mantener una cantidad estable de contagios en una determinada población.
El martes las autoridades sanitarias registraron 1.472 nuevos casos de COVID-19, y una tasa de positivos de apenas 2,1%, lo que sugiere una abrupta caída de los contagios. Se trata del nivel más bajo desde el primero de diciembre, cuando el 1,9% de las pruebas de diagnóstico resultaron positivas.
La cartera de Salud señaló que actualmente se conocen 25.941 casos activos de coronavirus en el país, entre ellos 922 que se encuentran internados en diferentes nosocomios.
De esta cifra, 578 enfermos se encuentran en grave estado.
El martes se registraron 11 fallecimientos y el miércoles por la mañana otros dos, con lo que el número de víctimas fatales por coronavirus desde que comenzó la pandemia asciende a 6.051.
Evidentemente, la drástica caída de los porcentajes de contagios está directamente relacionada con la amplia campaña de vacunación.
Hasta el momento, 5.140.261 israelíes han recibido al menos la primera dosis de la vacuna, es decir el 55,28% de la población, y 4.362.416 personas, o sea el 46,91%, ha recibido también la segunda.