Festival Internacional de Cine de Haifa en su edición número 34

4 octubre, 2018
Gutermann y esposa

El Festival Internacional de Cine de Haifa dirigido por Pnina Blayer, cerró su edición N° 34 y fue la mayor diversión del norte que atrajo miles de espectadores y turistas. Se presentaron cientos de filmes ante salas repletas, con entradas agotadas para la mayoría de las funciones. El filme “Otra historia” de Avi Nesher, abrió el festival con una proyección emocionante, especialmente por la presencia del director su esposa Iris y su hijo Ari Nesher (17) quien un día después falleció atropellado por un vehículo.
En el marco del concurso en la categoría de Cine Israelí se premió al filme “Tel Aviv on Fire” dirigido por Sameh Zoabi, y recibió 100.000 shékels. Además ganó el premio al mejor guión. Declaración del Jurado: “La película es un gran avance humorístico y un original punto de vista sobre el conflicto palestino-israelí que hace frente a la narrativa de ambos lados”. La película “Sin sangre” Yosef El-Dror, recibió el Premio de 50.000 shekels a la mejor ópera prima.
El premio al mejor actor en un largometraje fue otorgado a Neveh Tzur en el filme Noble Salvaje (Pere Atzil). En el marco del festival nos encontramos con Luis Gutmann, fundador y director del prestigioso Festival Internacional de Cine Judío de Argentina, que se presenta desde el año 2003. Luis fue invitado a formar parte del jurado en la categoría llama “Israel y la identidad judía”, y aprovechando su primera visita lo entrevistamos. Declaró que se sintió muy cómodo y contento de participar en este festival.
Sobre el cine judío nos dice que son películas que tienen un común denominador, que es la temática judía, que llegan de cualquier lugar del mundo y son producidas por todo tipo de realizadores no importa su religión. La película debe contener lo que se considera un tema judío. A veces algún filme israelí también, pero por su temática no por su origen aunque viniendo de Israel siempre tiene un toque judío. Tras 14 años reciben para su programación en este festival propuestas de todo el mundo a través de links y hay un comité de selección del festival que decide lo que incluye en la programación.
El principio que rige la elección además del tema judío es la calidad artística del filme. Luis fue programador del legendario “Festival de Cine de Mar del Plata” durante muchos años, y nos cuenta que esta idea surgió precisamente cuando recorriendo festivales para elegir filmes se dio cuenta de que había mucho cine temático, dedicado a varios asuntos, pero no al tema judío. Advirtió que todavía aún no existía en Argentina un festival de este tipo siendo que es un país que tiene la comunidad más grande unos 200 000 judíos, la mayoría reside en la capital.
Decidió que el tenía la experiencia necesaria para fundarlo y en el 2003 lanzaron la primera edición. Acudió a instituciones que son el pilar de lo judaico en Argentina, las que alentaron la idea pero la ayuda financiera estaría en función del éxito del proyecto. Y tuvo mucho éxito, por lo que a partir del segundo año tuvo la asistencia de varias instituciones. Pero con la crisis económica se ha producido una merma en general y también en el apoyo. Además los medios visuales actuales y la piratería hacen que la gente no salga mucho al cine y luchar contra eso es traer filmes que no se hayan visto. Los filmes del festival deben ser estrenos absolutos para el país, lo cual es difícil porque hoy en dia “los nietos le bajan a la “bobe” los filmes del Internet”.

Avi Nesher en la apertura

Luis explica que también ha estado luchando por conseguir un público joven. Sobre el antisemitismo en argentina nos dice que “hay manifestaciones pero son aisladas. No se pude decir que Argentina es un país donde crece al antisemitismo”. Con todo este festival en su 15ava edición debería llevarse a cabo en noviembre, pero eso está en duda, por la gigantesca desvalorización del dólar (de 15 pesos un dólar subió a 40) lo cual “ha trastocado todo el presupuesto y es difícil sostener económicamente y hay que revisar todo de nuevo.
O achicar el festival o tomar un año sabático para sopesar la situación”. Agrega para terminar la entrevista “toda manifestación que difunda la cultura judía ante la totalidad de la sociedad (recalca esto último) merece apoyo de parte de aquellos que pueden sostenerlo en las épocas de crisis”. Admite “que el aporte para cosas fundaméntales como techo y comida es importante pero sin cultura se lleva a la gente a la ignorancia y a los prejuicios.

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