BrainsWay, una compañía israelí, presentó recientemente una nueva tecnología desarrollada en sus laboratorios. Deep TMS es un casco que consigue una estimulación cerebral profunda no invasiva para modular circuitos neuronales alterados por distintas enfermedades.
Este nuevo dispositivo logra enviar pulsos magnéticos que penetran el interior del cerebro sin dañarlo, sin causar dolor ni convulsiones. Es un tratamiento no invasivo porque ni siquiera requiere sedación o anestesia.
Fue probado en más de 1700 pacientes que sufrían de depresión o ansiedad. Según los estudios publicados por la compañía, el 82% de los que recibieron más de 30 sesiones experimentaron una mejoría de los síntomas. Cada intervención dura 20 minutos. Los informes revelan que la mayoría de los pacientes comienza a mostrar mejoras luego de la sesión 16, o aproximadamente 20 días después de haber comenzado con el tratamiento.
Hadar Levy, CEO de BrainsWay, expresó su satisfacción con los resultados médicos obtenidos: “BrainsWay se complace de presentar esta evidencia real en relación a Deep TMS, que valida más aún el inmenso potencial de este tratamiento para la crisis global de salud mental”.