En un comunicado, el mandatario dijo que él y la primera dama estadounidense, Jill Biden, están «desconsolados por la noticia de que ahora se cree que Hamás asesinó al estadounidense Gad Haggai el 7 de octubre».
Se cree que la esposa de Haggai, la canadiense Judy Weinstein, sigue secuestrada por el grupo terrorista islámico, por eso Biden afirmó que está orando por el «bienestar y regreso seguro» de la mujer.
Una hija de Haggai y de Weinstein participó la semana pasada en una reunión telefónica que mantuvo el presidente estadounidense con familiares de rehenes de Hamás.
«Esas familias compartieron conmigo la terrible experiencia por la que han pasado durante los últimos meses esperando noticias de sus seres queridos», explicó Biden en el comunicado.
El mandatario dijo que esta situación es «intolerable» y reafirmó su «compromiso» de que no dejará de trabajar hasta lograr que los secuestrados puedan regresar a sus casas.
Hasta ahora se creía que Gadi Haggai, de 73 años, permanecía secuestrado por Hamás, pero en realidad fue asesinado el 7 de octubre en el ataque del grupo terrorista palestino al kibutz Nir Oz, cerca de la Franja, y su cadáver fue llevado a Gaza, según el periódico Haaretz.
En el ataque de Hamás contra Israel fueron asesinadas 1.200 personas y 250 secuestradas, lo que propició una operación terrestre de las Fuerzas de Defensa de Israel contra la organización terrorista islámica en la Franja de Gaza.
A finales de noviembre, Israel y Hamás acordaron una tregua que se prolongó durante una semana, en la que el grupo liberó 105 rehenes (24 extranjeros) a cambio de la excarcelación de 240 terroristas palestinos presos en cárceles israelíes.
Con información de agencias