A causa de dos ataques mortales que realizaron hombres afiliados al Estado Islámico, detuvieron a 43 sospechosos que posiblemente simpatizan con el grupo yihadista. La información salió de informes de medios en idioma hebreo.
Los datos confirman que 36 de ellos son el norte de Israel. El martes pasado, un hombre árabe israelí de Hura, quien estuvo preso por unirse a dicho grupo, mató a cuatro personas. El hecho sucedió en un centro comercial de Beer Sheva.
Y el último domingo, dos primos de Umm al-Fahm, uno que también terminó tras las rejas por el mismo motivo de simpatía, les quitaron la vida a dos policías. Fue en una para de ómnibus en Hadera.
El grupo yihadista se adjudicó la responsabilidad de ambas ofensivas. Pero no parece que los terroristas hayan obtenido instrucciones de este para cometerlas. Por su parte, la policía israelí estima que la ola de arrestos continúe vigente los próximos días.