Un palestino de Cisjordania (Judea y Samaria) sospechoso de haber atropellado a cuatro soldados israelíes, se entregó horas más tarde, argumentando que se trató de un accidente carretero.
Cuatro soldados que estaban de a pié patrullando la zona sufrieron heridas leves al ser atropellados por un automóvil con patente palestina a la entrada de la localidad palestina de Husan en Cisjordania.
El chofer, de 21 años, se entregó a las fuerzas de seguridad.
Según los reportes, el conductor es conocido por las fuerzas de seguridad y su hermano fue arrestado hace dos días.
El diputado del partido Likud, Yehuda Glick, publicó en su página de Facebook un comunicado que recibió de los habitantes de la localidad de Husan en el que le tratan de explicar el accidente.
«Los informes iniciales indicaban que se trató de un ataque terrorista con un vehículo», escribieron los habitantes sobre el incidente. «Ese no fue el caso. Inmediatamente después del accidente, los residentes palestinos de la zona prestaron asistencia a los soldados y llamaron a una ambulancia palestina».
«El conductor se entregó a la policía y declaró que fue un accidente y que tenía miedo de que si se quedaba, los soldados le hubiesen disparado”.
«Hemos advertido a los comandantes del ejército de los peligros para los soldados que caminan en medio de las calles de la localidad. Las calles están oscuras con muchas curvas cerradas y los conductores no se mantienen exactamente en sus carriles, por lo que era de esperar que sucediera un accidente».