Al menos dos oficiales del Ejército egipcio y trece supuestos terroristas murieron en las últimas operaciones militares en el norte de la península del Sinaí (noreste), informó el portavoz castrense, Tamer al Refai.
En un comunicado en vídeo, Refai afirmó que dos oficiales murieron y dos resultaron heridos «como resultado de los combates valientes» contra los terroristas y «las misiones sagradas» llevadas a cabo por el Ejército en la zona de las operaciones, que comenzaron el pasado 9 de febrero.
Los trece presuntos terroristas muertos fueron abatidos en un tiroteo producido durante una redada, aunque el comunicado no precisó ni el lugar ni la fecha del mismo.
Asimismo, los militares detuvieron a 86 personas, entre los que figuran supuestos terroristas «muy peligrosos», buscados por la justicia y sospechosos.
Además, aviones de la fuerza aérea destruyeron nueve objetivos de los «terroristas», dos coches bomba, cien refugios, escondites y almacenes e hicieron detonar diez artefactos explosivos.
Desde que la operación denominada Sinaí 2018 dio comienzo el pasado 9 de febrero, han muerto al menos doce militares y 95 supuestos terroristas, según los datos publicados por el Ejército a lo largo de la operación.
El norte del Sinaí es el refugio del grupo jihadista Wilayat Sina, como se denomina la filial egipcia del Estado Islámico (EI).
Amnistía Internacional (AI) denunció que las Fuerzas Armadas egipcias han utilizado bombas de racimo, un tipo de arma prohibida internacionalmente por sus efectos indiscriminados y de largo plazo, en esta ofensiva.
En la región rige un estado de exclusión militar, por lo que los medios de comunicación no pueden acceder al lugar y no se pueden verificar las informaciones facilitadas por el Ejército o Interior. EFE