Mara Klarinsky
Lo lindo: “Noche de paz, noche de amor él es –moishe- y él es –goy-”: así cantan en un gracioso video que realizaron para celebrar las festividades de Navidad y de Jánuca el rabino Marcelo Polakoff y el Monseñor Pedro Torres, obispo auxiliar de Córdoba, Argentina, integrantes del Comité Interreligioso por la Paz (Comipaz). La canción tipo villancico con ritmo de “sher” (tijera o música klezmer) busca unir a la gente y demostrar que “juntos se puede”. Se puede compartir la felicidad, la alegría y la tradición de cada uno sin subestimar o agredir al otro, con simpleza y buena predisposición.
Jánuca es la fiesta de las Luces y representa el milagro de la recuperación de la independencia judía a manos de los macabeos y la Navidad cristiana habla del milagro del nacimiento de Jesús. La celebración de Jánuca trae la luz con la “fiesta de las luminarias” y la luz de la estrella de Belén ilumina el lugar del nacimiento Jesús.
Las festividades simbolizan las enseñanzas de vida, los atributos históricos y la supervivencia de nuestra fe a través de las tradiciones. A todos nuestros lectores tanto de fe judía como cristiana, les deseamos muchas felicidades y que cada hogar reciba sus fiestas con amor y paz.
Un tiempo de claridad es lo que el mundo necesita por eso en este número de nuestra revista traemos a colación: lo bueno, lo malo y lo lindo que sucede en nuestro país y en los alrededores.
Lo bueno: El pueblo de Arrabá que tiene en su haber la mayor cantidad de médicos por habitante. La comunidad árabe del lugar está orgullosa del proceder de su gente y especialmente de su juventud, que dedica el tiempo a una misión tan ponderable.
Ingenieros sin Fronteras que llevan la luz a una aldea alejada de Tanzania, donde reina la inquietud y los problemas de salud debido a la falta de energía.
Un tema importante en el reino animal: el maltrato que muchos de ellos sufren a manos del hombre y cómo es posible con una startup israelí evitar el sufrimiento a millones de pollitos inofensivos que ningún mal le hicieron a la humanidad.
Lo malo: La crisis y la indignación de parte del pueblo alemán, por las violaciones que quedan impunes y son cometidas a manos de algunos inmigrantes sin escrúpulos, que dejan un tendal de sufrimiento y dolor a su paso.
La injusticia del mundo ante la crítica del muro que Israel levantó para protegerse de los ataques extranjeros, cuando Líbano lo hace dentro de sus fronteras y contra civiles palestinos acogidos en su tierra. La injusticia que viven éstos en los países árabes a quienes se les niegan los derechos básicos.
Lo lindo: La cultura, la música y el turismo en Israel. Por ejemplo, el festival Super Jazz que se llevó a cabo en Ashdod, con los mejores músicos de nuestro país y del exterior, la visita al valle del Jordán y del parque turístico Hamat Gader.
Las religiones ya no se pelean, ahora entendieron qo dé ue todas necesitan de creyentes, ya lo dice el tango, «Yo sé que todo es mentiraaaaaaa»
La Iglesia católica se mete hasta en la sopa, el caso es meterse. ¡Ojo al Cristo que es de plata!