La Corte Suprema resolvió cautelarmente que el Gobierno detenga cualquier operación en unas tierras del pueblo palestino de Silwad, en Cisjordania, donde está previsto que se trasladen veinticuatro familias de la colonia judía próxima de Amona.
Según informó en un comunicado la organización de defensa de los derechos humanos, Yesh Din, la Corte ha emitido una orden que prohíbe al Estado de Israel «asumir el control de estas parcelas en parte o en su totalidad».
Además, le insta a «abstenerse de realizar cualquier tipo de construcción sobre las parcelas de los peticionarios, incluyendo la instalación de estructuras, trabajos preparatorios o cualquier acción que pueda cambiar el estado actual de las tierras hasta que la Corte administre otra decisión».
El portavoz de Yesh Din, Gilad Grossman, dijo que los «dueños palestinos de estos terrenos presentaron una petición a la Corte a través de nosotros para evitar este intento de utilizar de manera ilegal propiedad privada palestina».
Los palestinos quieren impedir que veinticuatro de las cuarenta familias de Amona pasen a vivir en unos terrenos que han sido calificado de «abandonados» por el Estado como parte de un plan gubernamental de reubicación que da respuesta a una sentencia de desalojo de la colonia por parte de la Corte Suprema. Ésta dictaminó que los colonos tienen que ser evacuados antes del 8 de febrero porque el asentamiento está en tierras privadas palestinas, lo que le hace ilegal ante la ley israelí.
En diciembre y después de meses de negociaciones y fuertes tensiones, el Ejecutivo y los colonos de Amona llegaron a un acuerdo para una irse de manera voluntaria y ser trasladados a terrenos adyacentes.
Sin embargo, y después de varias complicaciones legales que han dejado solo tres parcelas conocidas como la 28, 29 y 30 para esta reubicación, el equipo legal de Yesh Din ha protestado contra el plan argumentando que «la decisión de usar propiedad abandonada para el beneficio de los residentes de Amona fue hecha bajo el pretexto de que era una necesidad urgente».
«Pero de hecho, el movimiento constituye una confiscación de tierra privada para propósitos políticos, concretamente, la estabilidad del Gobierno y apaciguar a los residentes de Amona», rechazó la organización en una nota. EFE y Aurora
Tendria que dictaminar que todos los habitantes de Amona van a la carcel (en Israel) por un año, junto con los facilitadores del gobierno que los puso alla.
Si esto no se cumple en dos semanas, el actual gabinete tambien.
Cuanto tiempo estos fundamentalistas descerebrados tendran a toda la poblacion de israel a su merced?
PONGANSE SERIO…. UNA VEZ POR TODA…
A LA JEFATURA DE ISRAEL LE TIEMBLAN LAS MANOS POR COBARDIA