Israel ha decidido acatar el pedido de la Autoridad Palestina (AP) de cortar el suministro de electricidad a la Franja de Gaza, controlada por el grupo terrorista islámico Hamás. La AP, que ha decidido aumentar la presión sobre su principal rival, anunció a Israel que no seguirá pagando las cuentas de electricidad.
El Gabinete de Seguridad aceptó las recomendaciones del Ejército de Defensa de Israel de cortar el suministro de energía a pedido del presidente de la AP, Mahmud Abbás, cuya confrontación con Hamás ha escalado en los últimos meses.
La AP había estado pagando 40 millones de shekels (11,3 millones de dólares) mensuales por 125 megavatios, pero recientemente ha dicho que está dispuesto a abonar solamente entre 20 y 25 millones de shekels (siete millones de dólares) mensuales para Gaza.
Las horas de suministro de electricidad en Gaza se verán reducidas ahora de seis horas diarias a entre dos y cuatro horas diarias.
Israel está preocupado de que mayores cortes de electricidad desestabilicen a Gaza, y la situación conduzca a un nuevo conflicto armado.
Un funcionario israelí le dijo al diario Haaretz que durante la reunión del Gabinete de Seguridad, el jefe del Estado Mayor, Gadi Eizenkot, el jefe de la Inteligencia Militar, Hertzi Halevy, y el Coordinador de las Actividades del Gobierno en los Territorios (COGAT), general Yoav Mordechai, describieron las deterioradas condiciones en la Franja de Gaza; pero aún así recomendaron presionar a Hamás, incluso advirtiendo que la situación podría conducir a una escalada. Según el funcionario, Mordechai recomendó a Israel adoptar una política que no contraríe a Abbás.
Una fuerte discusión se ha dado entre los miembros del establishment, tras la decisión palestina el mes pasado. Mordechai afirmó que cortaría el suministro de energía a Gaza. En cambio, el ministro de Energía, Yuval Steinitz, intervino diciendo que Israel decidirá en base a sus propias prioridades y no recibe órdenes de la AP. Steinitz volvió a “aguijonear” a Mordechai durante la reunión del Gabinete reiterando que no recibe órdenes de la AP, a lo cual Mordechai respondió sarcásticamente que le “hago la venia a Abbas”.
La discusión pone de relieve la trampa en la que estamos metidos cuando se trata de Gaza”, dijo el funcionario al diario Haaretz. “Por un lado, queremos trabajar con Hamas y no aliviar la presión sobre Hamás, y por otro lado [al final] todo recae sobre nosotros”.
Y el conflicto escalara, obviamente.
El primero en usufructuar la respuesta israeli a una nueva intifada sera Abbas.
Que Europa page la cuenta en lugar de pagarles a los terroristas, aunque lo hagan indirectamente, la ingenuidad no es una escusa en ningun juicio.
Cagones! vuelvan a los asesinatos selectivos y que no puedan dormir mas en gaza tranquilos. En gaza estan de vacaciones sus lideres, denele palo y bombas, destruyan los depositos de misiles y corten la energia.
Dos soluciones salomónicas, negociar con Egipto e investigar al WEBMASTER DE AURORA.