La lluvia es algo bueno: el mes pasado fue el diciembre más lluvioso desde 1992.
Mitzpe Harashim en el norte vio 437mm de lluvia, mientras que en el Kibbutz Ramat HaShofet llovió 430 mm y en Haifa se han registrado 322mm de lluvia, pero mientras que el nivel de Kinneret subió 24cm en 2016, todavía no está cerca de la Línea Roja Superior.
Los datos fueron dados a conocer por el Servicio Meteorológico de Israel.
El aumento de las precipitaciones en diciembre compensó el relativamente seco mes de noviembre, lo que provocó niveles de lluvia por encima de la media en el norte y el centro de Israel.
En el Kibutz Merom Golán en las Alturas del Golán, recibió 364 mm de lluvia. Otro lugar notable es el asentamiento de Kedumim en la región de Samaria, donde cayeron 324mm de lluvia, en Safed 313mm, y en el Kibutz Nahshonim, al sur de Rosh HaAin, cayeron 301mm de lluvia.
Entre las grandes ciudades, Haifa estaba a la cabeza con 322 mm de lluvia, seguido por HaKfar HaYarok cerca de Tel Aviv, donde se midieron 247 mm. Jerusalén recibió 170mm de lluvia, mientras que Beer Sheva sólo tuvo 33mm. La ciudad más austral de Eilat recibió la menor cantidad de lluvia, 2mm.
Desde el comienzo de la estación lluviosa, Jerusalén recibió 177 mm de lluvia, Tel Aviv 253 mm y Haifa 344 mm.
Las montañas centrales de Israel vieron lluvias más cercanas a la media, mientras que las planicies costeras del sur tenían precipitaciones de 20-30 por ciento por debajo del promedio. El norte del Néguev tenía un 30-45 por ciento por debajo de la media de las precipitaciones, mientras que en el Néguev central y el sur las precipitaciones fueron cercanas al promedio.
Diciembre también fue más frío que el promedio en todo el país, y fue el más frío desde 1994. Durante el día, las temperaturas fueron más bajas de 2.5-3 grados Celsius de la media en las montañas y valles del norte y 2-2.5 grados por debajo del promedio en la llanura costera, el Néguev y las montañas centrales de Israel. Durante la noche, hubo unas temperaturas de 1,5-2,5 grados Celsius por debajo del promedio en la llanura costera y los valles del norte.