En la Agentina existió una organización criminal judía en el siglo 20 que operaba bajo el nombre de “Zwi Migdal”. Sus proxenetas trajeron durante décadas miles de mujeres judías de Europa del Este para los fines de la prostitución y las vendieron a los burdeles en todo el país. Estos proxenetas fueron calificados de “impuros” por la comunidad judía.
Daniel Nijenson produjo la película “Tmeim” (Impuros), un documental que expone documentos, archivos, diarios personales y cartas, que transmiten la angustia que sentían las mujeres a sus familias y la compleja relación con sus proxenetas, que las contenían y alimentaban.
La comunidad judía ha silenciado este oscuro episodio, y un siglo más tarde aún prohíbe fotografiar los archivos y visitar las tumbas de los cementerios, silenciando por tanto las acciones de los proxenetas y la voz de las mujeres.
La película se transmitirá en el canal 1 de Israel (Arutz Rishon), el 4 de marzo a las 22:30.
El encabezado esta mal; fue una organización criminal, integrada por malos judios; que fueron puestos en jerem.
Tema polemicoreo que no conviene tratar viejas heridas respecto al Jerem ????????
La prostitución es un asunto delicado pero que todo el mundo sabe que existe. En España, un país muy católico, las cifras oficiales ya son escandalosas, pero encontramos a uno de los partidos fascistas que intentó relanzar Le Pen, con un líder acusado de poner dos bombas dentro de un grupo terrorista ultraderechista, que defiende la prostitución y este líder presidió una asociación de puticlubs españoles ANELA. Este partido también está en Valencia, una gran ciudad española centro de los partidos más ultraderechistas y de las sectas destructivas neonazis más locas, y que es conocida como la ciudad de las putas o los puteros (clientes habituales de prostitución). En otra ciudad muy católica y derechista, El Ejido de Almería, un policía explicó que existen prostíbulos de cuarta o quinta categoría para satisfacer los instintos sexuales a los inmigrantes que trabajan en los invernaderos en condiciones de esclavitud, estas mafias son dirigidas por violentos gitanos del este de Europa. La clásica prostituta blanca española voluntaria, aunque ha aumentado por la crisis económica actual, se ha sustituido por mujeres inmigrantes, latinoamericanas, rumanas, de Europa del este, africanas y subsaharianas, muchas llegan estafadas por mafias que las amenazan o a su familia o las aterrorizan con vudú. Las prostitutas inmigrantes han hecho bajar el precio, sobre todo las que trabajan en la calle, y tampoco faltan las estafas y coacciones a los clientes en el caso de la prostitución en pisos para el español de clase media.
La verdad, no miro nunca Arutz Rishon. Pues, ésta vez sí ví el seret teudí y lamentablemente deja bastante que desear. No me gustó para nada el castellano forzado del israelí que hace las entrevistas. La lectura de unas frases en idish de la carta de Raquel a su marido es un desastre, parece leída por alguien que ni siquiera entiende lo que está leyendo… Casi todo lo que se muestra y dice en la película ya apareció en otros medios. Resumiendo, concuerdo con las palabras del profesor Lichtenbaum del IVO hacia el final de la película : da la impresión que la hicieron más por curiosidad morbosa que por otra razón. Lo único que la pelicula sí nos confirma es que hoy es igual de fácil influenciar a la Justicia argentina como lo fué cien años atrás…