Stolpersteine es un proyecto de largo aliento que alcanzó un número significativo el 30 de mayo de 2023. Ese día se colocaron piedras de tropiezo en el exterior de la última vivienda de la familia Gutman en Feuchtwangen, Baviera.
Amy Gutmann, la embajadora de Estados Unidos en Alemania, participó del homenaje a los miembros de su familia, entre ellos su padre, Kurt Gutmann, que sobrevivieron al Holocausto, consiguiendo escapar de régimen nazi.
Las piedras de tropiezo son una que acuñó el escultor Gunter Demnig hace varias décadas. Es un memorial colectivo, que consta de pequeñas piezas en todo Alemania, y que ya se extendió a más de 20 países de Europa.
Como parte de la conmemoración de las víctimas y los sobrevivientes de la Shoá, en cada una de sus casas se incrustan en el pavimento unas placas doradas, que indican el nombre, la fecha de nacimiento, su deportación y el día de su muerte.
Se llaman así porque están pensadas para capturar la luz. Para que los transeúntes se topen con estas placas y se sientan interpelados, que conozcan una pequeña parte de la historia de esas familias judías. Esta semana, con el homenaje a la familia Gutman, Stolpersteine consiguió llegar a su piedra número 100.000, marcando un hito importante para el proyecto.