Después de un amesetamiento, la violencia en el sector árabe de Israel se está reactivando con varios asesinatos en la última semana, tres de ellos este lunes.
La policía confirmó la muerte a tiros de un hombre de unos cincuenta años en Jadeidi Makr, un pueblo al norte de Israel, el tercer homicidio del día dentro de la comunidad árabe-israelí.
El tiroteo se produjo después de que otro hombre fuera asesinado a tiros en I’billin esta madrugada, en lo que la policía apuntó como un «aparente asesinato» relacionado con clanes familiares criminales enfrentados.
Horas antes, en la misma comunidad del norte, un hombre asesinó a su esposa apuñalándola en su auto y más tarde se entregó a la policía.
Desde que empezó el año, han muerto 31 árabes-israelíes en incidentes violentos entre ellos, después de cerrar 2023 con 244 asesinatos, más del doble que el año pasado.
La alta cifra de 2023 se registró a pesar de que en el último trimestre, se aplacó tímidamente la violencia dentro del sector árabe israelí, donde tallan bandas criminales, mafias y disputas entre clanes familiares, además de violencia machista.
Las autoridades han culpado al floreciente crimen organizado y a la proliferación de armamento en las comunidades árabes, donde el 40 % de sus miembros viven por debajo del umbral de pobreza.
El verano pasado el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, formó un comité interministerial para luchar contra la violencia en el sector árabe para dar respuesta a la ola criminal.
Agencias contribuyeron con este artículo de Aurora.