Por cada gigante que abre sus puertas 600 startups fracasan

Según la empresa de investigación de alta tecnología IVC
La atención pública la acaparó en días recientes Intel al comprar Mobileye, automóviles de auto-conducción en un acuerdo gigante por el monto de 15.3 mil millones de dólares, pero el hecho es que también en la Nación Startup muchos fracasos mueren en la oscuridad, fomentando una actitud poco realista para empresarios e inversores acerca de sus perspectivas, este es un fenómeno que apenas se reconoció.
Cuando una startup cobra público conocimiento o se vende por decenas de millones de dólares, el mundo de la alta tecnología celebra en grande.
Muchas startup que no lograron una salida exitosa llegaron a ocupar titulares en los medios, como ser “Shai Agassi’s Better Place” (una red de coches eléctricos) y “Dov Moran’s Modu” (teléfono inteligente pre-iPhone), las dos fracasaron luego de haber recaudado cientos de millones de dólares.
Según las cifras preparadas por la empresa de investigación de alta tecnología IVC en línea para TheMarker, 653 startups que funcionaron comercialmente durante al menos cuatro años, cerraron sus puertas en el 2014 en Israel. En el 2013 figuraron 630 startups, en comparación con el número que comenzó que fue de 1.290.
Mientras que las compañías se apresuran a anunciar rondas de recaudación de fondos y lanzamientos de productos, poco se publica cuando van a la quiebra, lo que hace el seguimiento de los fracasos en alta tecnología mucho más difícil. Pero IVC estima que el número de startups que cierran cada año es la mitad de las que se inician, de manera que con un gran aumento en las formaciones de startups llega un gran número de fracasos más tarde.