Este verano se encuentran en Israel más de 2,000 jóvenes judíos de todo el mundo, aprendiendo sobre el ambiente laboral israelí y trabajando en varios start-ups, principalmente en la zona de Tel Aviv, como parte de un programa llamado Onward.
Onward nació en 2012 con el objetivo de conectar a las juventudes de América con el estado de Israel, lograr que se desarrollen dentro del ámbito empresarial en Israel y que puedan fortalecer su currículum con una experiencia en una cultura y país diferentes al suyo.
En 2012, primer año de Onward, el programa contó con 265 participantes, la gran mayoría de los Estados Unidos. El 2018, se registraron un total de 2,516 participantes de varios países, que incluyen México, Inglaterra y Francia, con programas adaptado a las necesidades de cada país.
Entrevista a Alex Mitrani, Onward México
¿Qué haces dentro del programa de Onward?
Estudio Producción Musical y encontré una pasantía dentro de un start-up, una aplicación que se llama VIBO, que facilita la planeación musical de un evento, como bodas o fiestas privadas. Te contacta con un DJ (previamente registrado en la aplicación) y pueden revisar juntos la música que se reproducirá en eventos. Yo estoy buscando DJ’s en México que quieran registrarse en la aplicación y ayudo a mejorar la interfaz de la aplicación para que sea fácil de usar. Aunque no se relaciona mucho con mi carrera, es una oportunidad excelente para aprender lo más que pueda de una empresa exitosa.
¿Qué diferencias hay entre el ambiente laboral de México e Israel?
Varias cosas. Desde el código de vestimenta, ya que aquí en Israel puedes inclusive ir en bermudas al trabajo, a los horarios, que son muy flexibles. Existen jerarquías, pero platicar con los jefes y dueños de start ups es mucho más fácil que en México. Son muy accesibles, no existen los límites como en México. Si tienes una idea o sugerencia puedes decirla directamente, no hay tantos códigos o protocolos.
¿Qué es lo mejor del programa Onward?
Sin duda alguna, la oportunidad de regresar a Israel, un país que me encanta y le tengo un gran afecto, poder vivir en una gran ciudad como lo es Tel Aviv. Más que estar de paso o viajando, estos dos meses realmente estoy viviendo en Tel Aviv, me gusta mucho mi trabajo y es un ambiente completamente diferente al de México.
Además de las pasantías, el programa Onward organiza excursiones con los grupos cada domingo, donde visitan grandes empresas de Israel, start ups que hoy en día valen millones dólares, para que puedan ver de primera mano el ambiente de éxito que se vive en Israel.
Además, los participantes de cada país tienen que participar en actividades que los conecten con la vida y sociedad israelíes, como pláticas con residentes de Tel Aviv, ya sean judíos, palestinos o drusos, para poder escuchar de primera mano opiniones sobre el conflicto en el país. Otra actividad consiste en conversar con cineastas locales, que tratan temas de judaísmo en sus películas, así como de actualidad israelí.
Otro participante, Jonathan Husni, también de Onward México, que tiene una pasantía distinta, en la empresa Modix, que fabrica impresoras 3D de tamaño industrial.
Entrevista a Jonathan Husni, Onward México
¿Por qué escogiste realizar la pasantía en Modix?
Soy un estudiante de mecatrónica y que mejor lugar que Israel para venir a aprender de una carrera que involucra mucha tecnología. Escogí Modix porque siempre me han interesado las impresoras 3D y todo lo que pueden hacer, y con el tamaño industrial que manejan en la empresa, no hay límites para lo que puedes crear. Lo que me gusta mucho son las tareas puntuales, específicas, pero sobre áreas de nuestro interés, ya sea diseño, algo más mecánico o electrónico.
¿Qué piensas del programa de Onward?
Es una gran experiencia para los jóvenes judíos de todo el mundo para venir a aprender a Israel, a trabajar y ser parte de la sociedad. Tiene sus pros y contras, pero en general es una gran oportunidad que hay que aprovechar.
Onward apunta a seguir creciendo como programa y seguir sumando más y más participantes año tras año, para que aquellos jóvenes judíos fuera de Israel, que no necesariamente conocen el país, puedan tener la oportunidad de viajar al estado judío y conocer el ambiente empresarial de la llamada «Start up Nation».