Al menos nueve personas murieron, entre ellas tres de una misma familia, por cohetes y barriles explosivos lanzados desde helicópteros en la periferia de Damasco, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Los helicópteros, cuya pertenencia no identifica la ONG, lanzaron al menos 60 barriles contra aldeas en la zona de Wadi Barda, donde hay enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y las facciones rebeldes e islámicas.
El presidente sirio, Bashar al Assad, consiguió su mayor victoria en más de cinco años de guerra en Siria, con la toma de Alepo en el norte del país.
Aunque todavía quedan zonas en poder rebelde en el norte, centro y sur del país, así como en la periferia de Damasco.
Más de 300 mil personas han muerto, entre ellas 90 mil civiles, y al menos dos millones han resultado heridas desde el inicio de la guerra en Siria, que además ha obligado a unos doce millones a abandonar sus hogares, según informó el pasado 13 de diciembre el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.